Las Bahías de Santoña y Santander tienen sus planes de explotación de almejas para 2023
Contarán con un stock explotable de 700 kilogramos y un periodo de veda biológica de tres meses en ambos casos
Las Bahías de Santoña y Santander tienen sus planes de explotación de almejas para la campaña de 2023. El Boletín Oficial de Cantabria (BOC) ha publicado hoy las resoluciones de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente la aprobación de estos planes.
El periodo hábil para la extracción de almeja comenzará el próximo día 1 de enero y se extenderá hasta el día 31 de diciembre de 2023, estableciendo un periodo de descanso desde el día 1 de abril y hasta el 30 de junio con el objeto de establecer una veda biológica para las especies.
Además, establece un stock explotable total de 700 kilogramos de almeja, y la cantidad puede ser revisada, en función de los estudios de seguimiento que se están realizando.
Ambas campañas afectan a las zonas de producción declaradas abiertas a la extracción según sus condiciones higiénico-sanitarias en cada una de las dos bahías, y están restringidas a los mariscadores que forman parte de cada plan, por medio del censo que los agrupa.
Además, se establece un cupo máximo de 15 kilogramos de almeja a la semana que cada mariscador puede gestionar a su conveniencia en el caso de la Bahía de Santoña, y de 20 kilogramos en el caso de la Bahía de Santander.
En cualquier caso y a la vista de los informes técnicos correspondientes, la campaña podrá ser suspendida, ampliada o modificada por la Consejería en lo que se refiere a los cupos explotables, las zonas explotación o cualquiera otra decisión en aras de la preservación del recurso y de los principios elementales de precaución.
Garantizar el recurso
El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco (PRC), ha explicado que la situación de los stocks de almeja de las zonas de producción de moluscos de Cantabria, unida a la dependencia económica que tiene el sector respecto a estas especies, ha hecho necesario establecer un régimen de explotación de la especie que permita garantizar una gestión sostenible del recurso.
Así, y a la vista de los buenos resultados de la campaña del año pasado y las condiciones del sector, Blanco ha defendido la continuidad de estas campañas específicas dada su importancia para lograr una extracción racional de almejas y que no se repita el colapso en la población de esta especie que sucedía en épocas pasadas.
Además, ha continuado, permite realizar un perfecto seguimiento de la pesquería, “mejorando las condiciones de gestión de estos moluscos”, mediante un control más exhaustivo de la extracción y comercialización, así como un conocimiento más exacto de la producción que genera y de las dinámicas de explotación de la especie por parte del sector marisquero.