Cantabria y Asturias reclaman una financiación para cubrir el coste de los servicios y el control del lobo

Los presidentes de Cantabria, Miguel Ángel Revilla (PRC), y de Asturias, Adrián Barbón, se han alineado para reclamar al Estado que la futura Ley de financiación autonómica prime el coste de los servicios, por encima del criterio poblacional que defienden otras Comunidades Autónomas, y también el control del lobo para garantizar la pervivencia de la ganadería extensiva.

Revilla y Barbón han mostrado esta sintonía en Pola de Laviana, la localidad natal del presidente asturiano, que hoy ha visitado su homólogo cántabro, coincidiendo con la celebración de la primera Muestra de Gastronomía Cántabra. Uno y otro han destacado los lazos fraternales que unen a dos territorios que, para el jefe del Ejecutivo cántabro, son “la misma tribu”, dos pueblos “absolutamente hermanos” que comparten historia, geografía, paisanaje y costumbres.

“No tengo la sensación de haber salido de Cantabria cuando paso el puente de Unquera, que es un puente que une, más que divide”, ha dicho el presidente cántabro.

Y esas mismas particularidades que tienen en común son las que llevan a Asturias y a Cantabria a defender posturas similares en multitud de asuntos, como en el caso de la financiación autonómica. Aquí, Revilla y Barbón coinciden en que cualquier ciudadano, viva donde vida, ha de tener los mismos servicios a su alcance, un principio básico que, han insistido, debe ser tenido en cuenta en el futuro modelo de financiación.

El presidente cántabro, concretamente, ha solicitado al Gobierno de España coherencia a la hora de plasmar en la práctica “los programas y las ideas” y ha enfatizado que la reivindicación de Cantabria y Asturias, entre otros territorios, es un “principio de igualdad que no puede rechazar nadie”.

En su opinión, financiar en función del número de habitantes va en contra del consenso instalado en torno a la lucha contra la despoblación de las zonas rurales, al igual que la sobreprotección del lobo que trasciende de su inclusión en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre), algo que en Cantabria está originando un “problema gordísimo” para el sector ganadero.

“Nos están haciendo una escabechina. Es una especie que hay que proteger, pero hay que proteger más a las personas”, ha apuntado el jefe del Ejecutivo cántabro, que ha denunciado que el Ministerio “quiere convertir Cantabria en un parque temático de lobos”.

Por su parte, Adrián Barbón ha mostrado su satisfacción por recibir en su municipio a Miguel Ángel Revilla y reforzar la unión entre asturianos y cántabros, entre otras cuestiones, en la defensa de un modelo de financiación que compense el coste de los servicios públicos en autonomías como Asturias y Cantabria, ambas con poblaciones muy dispersas y envejecidas.

Asimismo, ha coincidido con su homólogo cántabro en otros planteamientos como la defensa de la ganadería extensiva frente a la amenaza del lobo, la política demográfica o la apuesta por el medio rural.

“Es un placer para mí recibir a mi hermano en Laviana. Estos lazos de hermandad son buenos porque nos permiten que nuestro modelo de política normal, de gente normal haciendo política, triunfe y marque una pauta dentro de la toxicidad que hay en otros ámbitos”, ha dicho Barbón.

La visita

La visita de hoy, con la que Revilla corresponde a la realizada por Barbón hace algunas semanas al Valle de Polaciones, ha comenzado en el Ayuntamiento de Laviana, donde ambos presidentes han saludado al alcalde, Julio Luis García, y a otros miembros de la Corporación municipal.

Seguidamente, Revilla y Barbón han asistido a la feria de gastronomía cántabra, que se celebra durante todo el fin de semana en las inmediaciones de la iglesia del pueblo con la participación de nueve productores regionales de sobaos, anchoas, quesos, miel, vinos, licores, sidras o arándanos, entre otros productos.

Allí está representada también la Oficina de Calidad Alimentaria (Odeca) con un estand para promocionar los productos cántabros y el buen hacer de los maestros artesanos.

El evento gastronómico incluye degustaciones de productos y, en la jornada del domingo, un pasacalles a cargo del grupo de folclore cántabro ‘Gaitas de Gediu’.