Desmanteladas dos plantaciones de marihuana en Torrelavega y el Valle de Liébana

La Policía Nacional ha detenido a dos individuos como presuntos autores de un delito de tráfico de drogas, relacionado con el cultivo y explotación de dos plantaciones indoor de marihuana, y otro delito de defraudación de fluido eléctrico.

A principios del pasado mes de diciembre, la Jefatura Superior de Policía de Cantabria tuvo conocimiento de la existencia de una organización, con estructura jerarquizada y reparto de roles entre sus integrantes, todos ellos de nacionalidad albanesa, que podrían dedicarse al tráfico de drogas y utilizaron dos inmuebles, uno en el barrio de Sierrapando, en Torrelavega, y otro en el Valle de Liébana.

Con esa información inicial, los agentes especializados en la investigación de ese tipo delictivo, iniciaron las pesquisas logrando ubicar los inmuebles interesados y obtener la información e indicios necesarios para poder determinar que ambos lugares eran utilizados para el cultivo masivo, recolección, secado y almacenamiento, de marihuana, así como que las personas investigadas carecían de actividad laboral reglada.

Los agentes policiales comprobaron que en el barrio de Sierrapando, los investigados utilizaban dos naves que se hallaban en un recinto cerrado y dotado de cámaras de vídeo-vigilancia, lugar donde además vivían esas personas desde hace un año aproximadamente y del que emanaba un fuerte olor a marihuana. Del mismo modo, en el Valle de Liébana, en Valdeprado y Pesaguero, se ubica el otro inmueble investigado, tratándose de una vivienda de tres alturas.

Durante la investigación se constató que estas personas adoptaban medidas de seguridad que dificultaban las labores policiales, mostrándose esquivos y extraordinariamente discretos en su proceder, así como permanente actitud vigilante, utilizando vehículos con placas de matrícula del Reino Unido. Los investigadores sospechan que la sustancia obtenida estuviera destinada a su posterior venta fuera del territorio nacional.

Por otro lado, por medio de personal de la distribuidora eléctrica, se pudo acreditar que en las dos direcciones interesadas, la conexión a la red general era irregular, lo que supone una pérdida energética, y por tanto, la correspondiente defraudación.

Una vez recabada la información e indicios necesarios, que señalan la ilícita actividad desarrollada y tras judicializarse la investigación, el grupo estableció un dispositivo policial para su explotación operativa, con la participación coordinada de varias Unidades de esta Jefatura Superior, así como con apoyo del Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES), que se encargó del asalto a los inmuebles para garantizar la seguridad de los intervinientes, asegurar a los investigados y evitar cualquier reacción, así como la destrucción de cualquier prueba. Además, colaboró personal de la distribuidora eléctrica que desconectaron y normalizaron la conexión fraudulenta.

La explotación de la investigación se desarrolló durante el pasado día 14 de enero, de tal forma que se llevó a cabo las correspondientes Diligencias de Entrada y Registro en los inmuebles de ambas localidades, previamente autorizadas por la Autoridad judicial competente, en las que se pudo acreditar la comisión de los delitos de tráfico de drogas, consistente en el cultivo y explotación de dos plantaciones indoor de marihuana, y de defraudación de fluido eléctrico.

140.000 euros

Fruto de la intervención, los agentes hallaron en ambos inmuebles, una sofisticada instalación para el cultivo y explotación de marihuana en interior, con centenares de balastros y pantallas reflectantes y demás elementos necesarios para esa actividad, muy superior al hallado en otras investigaciones, cuyo importe de compra superaría los 140.000 euros, todo lo cual pone de manifiesto la especialización y profesionalidad de los investigados, así como el importante desembolso económico para su adquisición y montaje. De igual forma, tenían preparado más material para una nueva plantación adicional, según la Policía Nacional.

El dispositivo se saldó con la detención de dos personas y la intervención de plantas en su último estadio de floración, con un peso bruto de 113 kilogramos además del material necesario para esa actividad (lámparas halógenas, extractores, ventiladores, deshumidificadores, y otros útiles).

La sofisticación de la plantación, tanto a nivel técnico en lo relativo a la infraestructura utilizada, como cualitativo por la manipulación genética de las semillas, propiciaba un extraordinario rendimiento en la producción de sumidades floridas, de hasta veinte veces superior al que tendría una plantación convencional.

La venta al menudeo en el mercado ilícito del producto de las plantas intervenidas, hubiera supuesto un montante superior a 427.000 euros, si bien, tal y como los investigadores sospechan, si su destino fuera otro país europeo, como pudiera ser Reino Unido, dicho valor se multiplicaría exponencialmente.

La notoria importancia de la sustancia intervenida, unido al riesgo de fuga de los dos investigados y su profesionalidad y especialización en la actividad delictiva, propició que la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción cuatro de Torrelavega, en funciones de Guardia, decretara el ingreso en prisión de los dos detenidos, una vez fueron presentados por la Policía Nacional ante ese Juzgado.

Con  esta operación policial se logra la desarticulación de dos plantaciones de marihuana con un nivel de sofisticación, caracterizada por la producción continua de un elevado porcentaje de sumidades, consiguiendo paralizar la ilícita actividad delictiva de este grupo criminal, al que se asesta un importante golpe económico, no solo por la sustancia incautada, sino también por el desmantelamiento e incautación de la costosa infraestructura con la que contaban, dándose por concluida la operación en Sierrapando y en Valdeprado.