Los fisioterapeutas reclaman prescribir y muestran su preocupación por el tratamiento a pacientes por personal no sanitario
El colegio de Fisioterapeutas de Cantabria se reunió con la Dirección General de Deportes para conciliar posturas sobre la prescripción médica de ejercicio a los pacientes
Los fisioterapeutas reclaman prescribir y muestran su preocupación por el tratamiento a pacientes por personal no sanitario.
La vicedecana del Colegio de Fisioterapeutas de Cantabria, África Ruiz Merino, y la vocal de fisioterapia pública y privada de la Junta, Cristina Macho San José, han mantenido una reunión con la directora General de Deporte del Gobierno de Cantabria, Susana Ruiz, para abordar una preocupación que arrastran desde hace un año.
El colectivo se muestra contrario al acuerdo de la Conferencia Sectorial de Deporte que permite a graduados en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte recetar ejercicio terapéutico a pacientes con patologías.
Tras el encuentro, la vicedecana indicó que hay predisposición por parte de la Dirección General para, en caso de continuar el proyecto, incluir a fisioterapeutas y que, además, se llevarán a cabo encuentros con el Servicio Cántabro de Salud para explorar soluciones que cumplan con sus requerimientos.
Con estas reuniones, los profesionales de la fisioterapia en Cantabria buscan aclarar esta situación, ya que consideran que lo contrario pondría la salud de los pacientes en manos de personal no sanitario, implicando no solo una desprotección de la salud ciudadana sino también una invasión de competencias sanitarias propias de la fisioterapia.
Desde el Icpfc destacaron que la profesión responsable de la función y el movimiento en el ámbito sanitario es la fisioterapia. También, señalaron que tanto las Consejerías de Deporte como el Ministerio de Cultura y Deporte tienen competencias exclusivas en el ámbito deportivo y no reguladoras en el ámbito sanitario, por lo que el acuerdo excede sus funciones.
Los representantes de los profesionales colegiados de Cantabria han advertido del evidente riesgo para la salud de los pacientes que implica la no inclusión del profesional sanitario con competencias legales para llevar a cabo el ejercicio físico terapéutico.