Querencia, danza española de gran formato a cargo de la Compañía de Antonio Najarro
Los Marcos Históricos serán en la iglesia de San Juan de Colindres que acogerá ‘Numen, la inspiración del artista’, un programa que incluye obras de Antoine Forqueray, Jean-Philippe Rameau, Marín Arias, Jean Marie Leclair y el Padre Antonio Soler a cargo de Vivalma Ensemble
Tras el gran éxito del último espectáculo de la Compañía de Antonio Najarro, ‘Alento’, en el que el que la Danza Estilizada y el Flamenco evolucionan a formas más contemporáneas, mostrando así un nuevo lenguaje y estética dancística, Antonio Najarro afronta su sexta producción, con la que llega el 21 de agosto a la 72 edición del Festival Internacional de Santander (FIS).
Se trata de ‘Querencia’, en la que evoluciona en su deseo de revisitar sus orígenes, recuperar y ensalzar la inspiración del lenguaje de los grandes ballets coreográficos que en su día hicieron grandes figuras como Antonio Ruiz Soler, Mariemma, entre otros.
Así, la Sala Argenta acogerá este nuevo espectáculo de danza, que tanto gusta en el festival santanderino, que viene avalado por las excelentes críticas obtenidas desde su presentación y después de una exitosa gira por Buenos Aires, concretamente en el Teatro Coliseo de la capital, donde ha ofrecido su ‘Querencia’ con gran acogida del público.
‘Querencia’ es un espectáculo de danza de gran formato, de una hora 15 minutos de duración sin entreacto, compuesto por 11 cuadros, con 16 bailarines en escena, en igualdad de hombres y mujeres, que convierte a la Compañía de Danza de Antonio Najarro, en la compañía de danza privada con mayor representatividad nacional e internacional de los valores, historia y contenido de toda la Danza Española.
Como soporte musical de esta gran producción, Najarro ha encargado componer una música original para orquesta sinfónica. Este es otro de los grandes retos de Querencia, dotar al repertorio de la música española de una nueva composición que llene el vacío que existe en las actuales composiciones sinfónicas para creadores de Danza Española.
Pianista
Esta música ha sido compuesta por el pianista Moisés Sánchez y grabada por la Orquesta de Extremadura. Una composición en la que tienen protagonismo los tiempos boleros, ritmos flamencos y melodías que hacen referencia a creaciones de repertorio de grandes compositores como Falla, Turina, Granados, Albéniz, entre otros, pero con una visión y sonidos totalmente actuales”.
‘Querencia’ se puede considerar un espectáculo en el que se pone en valor la Danza Española en todos sus estilos, una personal visión coreográfica de Najarro que lo convierte en un viaje a través de la belleza interpretativa y estética de la Escuela Bolera, la Danza Estilizada, la Danza Tradicional y el Flamenco, donde la indumentaria y todos los complementos que acompañan la interpretación de estos estilos, como el sombrero cordobés, el mantón de manila, la capa española, la bata de cola y el instrumento que más caracteriza a Najarro, las castañuelas, juegan de la mano de los versátiles bailarines de la compañía, ensalzando la belleza y la proyección interpretativa y estética de nuestra danza.
Un ballet en el que los movimientos grupales, solos y dúos «huyen por medio del recuerdo e inspiración de las grandes composiciones sinfónicas para Danza Española, situándolos en nuestros días”.
El vestuario es otro de los puntos fuertes del espectáculo. Su diseño ha sido encargado a Yaiza Pinillos, una de las diseñadoras especializadas en el vestuario de Danza Española con mayor proyección actual. Este vestuario está inspirado en el diseño tradicional de la Danza Española, pero actualizado, utilizando tejidos y tratamientos nuevos, volúmenes y cortes que conjugan la tradición con el vanguardismo, consiguiendo que cada pieza sea una verdadera joya representativa de la evolución en la vestimenta que acompaña la Danza Española.
El espectáculo ha sido nominado a siete candidaturas para la 21 edición de los Premios Max entre los que destaca: Mejor Espectáculo de Danza, Mejor Coreografía, Mejor Composición Musical, Mejor Producción y Mejor Intérprete masculinos (Carlos Romero y Daniel Ramos) Najarro combina estrenos y giras con una intensa labor pedagógica de difusión de la danza española por medio de charlas, master clases, conferencias, encuentros con el público y, sobre todo, con su espectáculo pedagógico actualmente en gira La Mirada de la Danza Española.
Antonio Najarro
Antonio Najarro (Madrid, 1975) Bailarín y coreógrafo, formado por los más prestigiosos maestros de danza en todos los estilos: ballet clásico, escuela bolera, clásico español, folclore, flamenco y danza contemporánea. Matrícula de Honor en Danza Española en el Real Conservatorio Profesional de Danza Mariemma de Madrid.
Inicia su carrera profesional con 15 años, formando parte de las compañías de danza española más reconocidas como el Ballet Antología, Ballet del Teatro Lírico de La Zarzuela, Compañía Antonio Márquez, José Antonio y los Ballets Españoles y Compañía de Aida Gómez interpretando como Primer Bailarín coreografías de Mariemma, Jose Granero, Alberto Lorca, Jose Antonio, Antonio Gades, entre otros.
En 1996, es solista invitado en la obra La Gitana, coreografiada por José Antonio Ruiz y Paul Chalmer, con el Ballet de la Arena di Verona bajo la dirección de Carla Fracci. Ingresa en el Ballet Nacional de España (BNE) en 1997, bajo la dirección de Aurora Pons, Nana Lorca y Victoria Eugenia y tres años después, asciende a la categoría de Primer Bailarín con Aida Gómez en la dirección artística de la compañía.
Su vocación creadora le lleva muy pronto a coreografiar, participando en varias ediciones del Certamen Coreográfico de Danza Española y Flamenco de Madrid con Suspiro del Moro (1995), Movimientos Reversos (1996) y Nereidas (1999), primer Premio a la mejor coreografía en la octava edición del mismo Certamen e incluida posteriormente en el repertorio del BNE.
Además, crea su propia Compañía Antonio Najarro en 2002, para la que ha coreografiado cuatro producciones: Tango Flamenco (2002), Flamencoriental (2006), Jazzing Flamenco (2008) y Suite Sevilla (2011).
Es, asimismo, habitual creador de piezas para grandes figuras del patinaje artístico sobre hielo, obteniendo Medalla de Oro en los Juegos Olímpicos de Invierno Salt Lake City (2002) con Flamenco para la pareja francesa Marina Anissina y Gwendal Peizerat y con Poeta y Otono Porteno (2006-2008) para el suizo Campeón del Mundo, Stephane Lambiel y Medallas de Oro en los Campeonatos del Mundo de Boston (2016) y Campeonatos de Europa (2017 y 2019) para el español Javier Fernández, con la coreografía Malagueña de Ernesto Lecuona.
En el año 2018 colabora como coreógrafo, junto a la entrenadora Mayu Fujiki, con el Equipo Nacional Español de Natación Artística en la coreografía Pasión Malaguena.
Antonio Najarro es nombrado Director del BNE en abril de 2011, se incorpora a la Compañía el 1 de septiembre 2011. Desde su llegada a la dirección artística del Ballet Nacional de España, mantiene vivo el ya enorme repertorio cultivado, abre una vía para la nueva creación, y apoya y amplía la difusión del complejo espectro del folclore nacional.
Para ello repone obras míticas de la compañía como Danza y Tronío, de Mairemma, el Bolero, de Rafael Aguilar, Ritmos, de Alberto Lorca, Medea del maestro Granero, Viva Navarra, de Victoria Eugenia, entre otras, y pone en escena el programa que reúne creaciones históricas de Antonio el bailarín, por medio del espectáculo Homenaje a Antonio Ruiz Soler y el programa con el que celebra el 40 aniversario del BNE donde presenta varias de las coreografías más emblemáticas de la historia de la compañía.
Crea para el BNE obras propias como: Suite Sevilla, Alento, Eterna Iberia, Ícaro, y varias piezas del ballet Sorolla. La necesaria vertiente dedicada al folclore ha sido más compleja, tras tres años de preparación del equipo, Najarro dirigió y estreno el ambicioso proyecto Sorolla, inspirado en la colección Visión de España del pintor, obra de envergadura que, a partir de una ingeniosa dramaturgia, hace un despliegue único y coherente de danzas propias de Castilla, Aragón, Navarra, Guipúzcoa, Sevilla, Galicia, Cataluña, Valencia, Extremadura, Elche y Ayamonte. Una coreografía colectiva firmada por Arantxa Carmona, Miguel Fuente, Manuel Linan y el mismo Najarro, quienes dan vida a esas imágenes a través de las danzas de cada lugar.
Adicionalmente, Najarro proyecta una imagen innovadora del BNE, capaz de complacer a su público de siempre, pero también atraer a uno nuevo, probablemente más joven, que se sienta identificado con las renovadas propuestas de la agrupación, en sintonía siempre con la sensibilidad del momento.
La pluralidad ha caracterizado al Ballet Nacional de España bajo su dirección, abordando grandes proyectos pedagógicos, de acción social, moda, pintura y deporte, dando una gran visibilidad a la compañía en los medios de comunicación, Najarro ha contado con la colaboración y aportación de los coreógrafos Roció Molina, Olga Pericote, Rubén Olmo, Mar López, Francisco Guerrero y Carmen Cubillo, así como también con destacados creadores que además de estrenar sus piezas, han impartido clases al equipo como Rafaela Carrasco, Javier Latorre, Blanca del Rey, Mercedes Ruiz, La Lupi, Pilar Azorin, Marco Flores, Franco Dragone, Antonio Ruz y, solamente como docentes, Carlos Vilan, Jon Maya y Merche Esmeralda entre otros.
Colindres
La iglesia de San Juan de Colindres acogerá, a partir de las 21.00 horas, ‘Numen, la inspiración del artista’, un programa que incluye obras de Antoine Forqueray, Jean-Philippe Rameau, Marín Arias, Jean Marie Leclair y el Padre Antonio Soler, que interpretará el trío Vivalma, dentro del ciclo de los Marcos Históricos.
El hilo conductor de ‘Numen’ es la gran fuente de inspiración que los compositores y su música fueron los unos para los otros. Así, muchas de las piezas de este programa llevan por título el nombre de los compositores que claramente fueron numen de otros: la inspiración para escribir estas obras podía nacer de su forma de tocar, de componer, o incluso de sus propias personalidades.
Gracias a estas piezas se acerca a estos artistas y se conoce la visión que sus coetáneos tenían de ellos. Jean-Philippe Rameau escribió La Forqueray y La Marais, compositores considerados por sus contemporáneos como los mayores virtuosos de la viola da gamba de su tiempo. De Forqueray se decía que interpretaba como un demonio, y de Marais, como un ángel.
Antoine Forqueray escribió La Leclair y La Rameau. Jean-Marie Leclair, conocido como «el Corelli de Francia» por su educación musical italiana, era uno de los mayores virtuosos del violín de su tiempo. Considerado el fundador de la escuela francesa del violín, destacaba por la dulzura de su sonido y la brillantez de sus dobles cuerdas. De él también se decía que tocaba como un ángel gracias a su libertad rítmica y la limpieza de su sonido.
Jean- Philippe Rameau fue junto con Frarnçois Couperin el gran maestro de la escuela francesa del clavecín en el siglo XVIII. En sus Pieces de clavecín en concerts, presenta al clavecín como corazón del ensemble con una parte obbligato muy virtuosística, acompañado por el violín y la viola da gamba.
Otra frecuente fuente de inspiración ha sido siempre la música popular y las danzas como la Folía, de la que se sirvieron Arcangelo Corelli, Alessandro Scarlatti y Marin Marais para componer sus variaciones sobre este bajo ostinato. Con nuestro arreglo presentamos una versión que aúna los estilos franceses e italianos y que explota las posibilidades idiomáticas de los tres instrumentos.
La Folía es descrita por Sebastián de Covarrubias en su Tesoro de la lengua castellana (Madrid, 1611) como: Una cierta danza portuguesa de mucho ruido; porque resulta de ir muchas figuras a pie con sonajas y otros instrumentos, llevan unos ganapanes disfrazados sobre sus hombros unos muchachos vestidos de doncellas, que con las mangas de punta van haciendo tornos y a veces bailan, y también tañen sus sonajas y es tan grande el ruido y el son tan apresurado, que parecen estar los unos y los otros fuera de juicio.
Y así le dieron a la danza el nombre de folía, de la palabra toscana ‘Jo/le’ que vale vano, loco, sin seso, que tiene la cabeza vana. Marin Marais eligió también un bajo ostinato basado en tres notas para componer la Sonnerie de Sainte Genevieve du Mont-de-Paris, inspirada en las campanas de dicha iglesia.
Vivalma Ensemble está formado por Marta Ramírez García-Mina (violín), Marina Cabello del Castillo (viola da gamba) e Inés Moreno Uncilla (clave). El trío se consolida durante sus estudios en la prestigiosa Schola Cantorum Basiliensis gracias al interés de sus miembros por la música barroca y la interpretación histórica.
La piedra angular del ensemble es la riqueza de texturas y timbres que ofrece la versatilidad de cada uno de los instrumentos, así como el armónico equilibrio que crean en conjunto. Los miembros de Vivalma no sólo comparten una gran afinidad musical, sino que además sus interpretaciones sumergen al oyente en esa profunda complicidad construida durante ensayos, viajes, reuniones telemáticas y desternillantes anécdotas.
La creatividad es la cualidad más presente en todos los programas que el conjunto ha ideado. Una de sus definiciones es “hacer algo distinto con aquello que ya se tiene”: este es precisamente el principal objetivo del ensemble. Cada programa es único y se desarrolla a través de hilos conductores como pueden ser la danza, las relaciones que se dieron entre diferentes compositores, la inspiración de los mismos o los fantásticos contrastes nacionales de la época.
En 2017 el trío debuta en el ciclo Jóvenes Intérpretes de la Fundación Juan March y desde entonces desarrolla su actividad artística principalmente entre Suiza y España. En cada concierto Vivalma busca dejar tras de sí la resonancia de aquello que los tratadistas del Barroco consideraban el mayor objetivo de la música: “la finalidad de la música no es solamente agradar al oído, sino también expresar sentimientos, despertar la imaginación, afectar a la mente, y dirigir las pasiones”. Francesco Geminiani, ‘The Art of Playing the Violin’ (1751).