UGT, CCOO, SIEP y CSIF exigen una negociación para repartir los fondos adicionales de 2022 entre su personal

Concentración junto al Gobierno de Cantabria.

Los sindicatos, salvo TU, se concentraron en señal de protesta y fuerzan una reunión para el viernes, día 21 de octubre, con la consejera de Presidencia

Los sindicatos de la Junta de Personal y del comité de empresa del Gobierno de Cantabria, UGT, CCOO, SIEP y CSIF, exigieron hoy al Ejecutivo autonómico una negociación real y urgente para acordar el reparto aún pendiente de los fondos adicionales de 2022 entre el personal tanto funcionario como laboral.

La cantidad asciende a algo más de 1,7 millones de euros "que ya deberían de estar en los bolsillos de los empleados públicos", remarcan.

El sindicato Trabajadores Unidos (TU) considera que hay movilizaciones trampa por parte de otros agentes sociales acerca del reparto de los fondos adicionales. De hecho, Trabajadores Unidos asegura ser el sindicato mayoritario de la función pública tanto del personal funcionario como laboral, y no ha secundado la movilización anunciada, de la misma forma no está de acuerdo con la propuesta de la administración, ni con la propuesta de otros agentes sociales.  

Según precisaron portavoces de los sindicatos UGT, CCOO, SIEP y CSIF, en una asamblea y concentración de delegados de los cuatro sindicatos frente a la sede del Gobierno de Cantabria, en la calle Peña Herbosa, la consejera de Presidencia y responsable de la política de personal, Paula Fernández (PRC), "se niega a negociar y mantiene bloqueado cualquier opción de llegar a un acuerdo".

Los sindicalistas aclararon que, en el transcurso de la concentración, la titular de Presidencia del Gobierno de Cantabria se comprometió a mantener una reunión sobre los fondos adicionales el viernes, día 21 de octubre, a las 8.30 horas, e insistieron en que se trata de una partida presupuestaria a repartir entre el personal funcionario y laboral que fue aprobada en el Parlamento e incluida en el presupuesto de Cantabria de 2022.

"Ella y solo ella mantiene bloqueada la distribución de un dinero que debería estar ya en el bolsillo de los empleados públicas del Gobierno de Cantabria en una situación insostenible, donde ha sido imposible llegar a un acuerdo porque pretenden elegir a quién y cómo pagar los fondos sin negociación alguna, y todo ello, llevándonos a unos incrementos de jornada que no estamos dispuestos a asumir", recalcó Rebeca Marqué (UGT).

En el mismo sentido, Carmelo Renedo (CCOO) criticó que "un año más el Gobierno de Cantabria usurpa a los empleados públicos un dinero que debería de estar en su bolsillo desde principios de año como ya hiciera en 2019, 2020 y 2021" en lo que, para el sindicalista "es una clara estrategia de aprobar partidas presupuestarias para mejorar las condiciones laborales que al final terminan quedándose en las arcas del propio Gobierno".

"Hemos intentado desbloquear la negociación por distintas vías pero no se puede negociar en estas condiciones si no cambian el paso", agregó Inés Laso (CSIF), para quien "lo que está muy claro es que la Administración en realidad se niega a negociar".

Ester Felices (SIEP) reiteró que "la Administración parece que ha dado por cerrada la negociación porque tienen líneas rojas pero nosotros también" después de recordar que "estamos en octubre y no tenemos visos de llegar a un acuerdo".

Los portavoces de los cuatro sindicatos declararon que "creemos que es posible llegar a un acuerdo y que éste debe ser inmediato porque después se requiere modificar el convenio y aprobar la Relación de Puestos de Trabajo que den validez al cobro de las mejoras".

Versión de TU

Desde este sindicato recuerdan que al término de la reunión del día 13 de octubre y tras la falta de unanimidad en las posturas sindicales, se planteó por parte de uno de los sindicatos de la mesa iniciar una concentración para el miércoles, día 19 de octubre. “Organización que junto con el resto de sindicatos de la mesa, defiende y ampara propuestas que dejan fuera a la mayoría de los laborales”, señalan.

Cuando se planteó la movilización, Trabajadores Unidos solicitó un documento que sirva de base para las reivindicaciones que amparan la movilización, y no se quiso presentar por parte del resto. “Esto nos conduce a  pensar que una de dos, o la movilización pudiera estar orquestada con la Administración, no sería la primera vez, o realmente se pretende defender posturas que Trabajadores Unidos no va avalar”, matizaron.

En este sentido, hicieron hincapié en dejar a todo el personal del Grupo tres de educación subalternos y empleados de servicios con una bolsa de horas a libre disposición del centro por 900 euros. A esa postura que defendieron varios sindicatos, Trabajadores Unidos manifestó su desacuerdo y siguen insistiendo en el Complemento Singular de Puesto.

Además, el sindicato confirma que dejan fuera y no quieren oír hablar, entre otras cuestiones de la disponibilidad de los Técnicos de Planta Hidrológica, el Complemento Singular de Puesto para los Técnicos Superiores de Educación Infantil (TSEI) y el incremento en el Complemento Singular de Puesto, equiparado al del Centro de Dependencia de Sierrallana de los colegios de educación especial Parayas, Pintor Sáez o  Ramón Laza.

A ello se une la plaza de encargado de Viérnoles, los encargados de los Centros de Dependencia, los complementos Singulares de los Puestos de personal de Carreteras Vías y Obras y Oficiales de Oficios de Autopsias, sin olvidarse de la Jornada Prolongada de la Hospedería del Mar, equiparar las retribuciones del personal que presta servicio en los Laboratorios el acuerdo con los Encargados de Planta Hidrológica.

“A cambio nos adjuntan propuesta de modificación de convenio para las carteleras del Instituto Cántabro de Servicios Sociales (Icass) y del resto del personal laboral que supone un retroceso y que deja más al arbitrio de la Administración los descansos del personal”, señalan.

A su juicio y con este panorama y la actual política de privatizaciones contra las que Trabajadores Unidos indicó que está luchando, “no nos queda otra que la denuncia en solitario, y no caer en la trampa de ser rehenes de las pretensiones de otros que no favorecen al conjunto de los trabajadores ni al servicio público”.