Land Life plantará más de 27.000 árboles autóctonos en Liébana
Land Life, empresa de restauración ambiental con sede en Burgos dedicada a la reforestación de precisión, ha iniciado la plantación de más de 27.000 árboles de especies autóctonas en 35 hectáreas de tierras, situadas en los municipios de Cillorigo y Cabezón de Liébana. El proyecto permitirá crear un bosque resiliente y saludable, capaz de adaptarse a alteraciones adversas del medio ambiente como el cambio climático, los incendios, la sequía o las plagas.
La zona reforestada corresponde a montes de utilidad pública y el proyecto se ha impulsado en colaboración con la Dirección General de Montes y Biodiversidad del Gobierno de Cantabria y con las Juntas Vecinales de San Sebastián, en Cillorigo de Liébana, y Frama, en Cabezón de Liébana.
Con una trayectoria de más de tres millones de árboles plantados en la Península Ibérica y más de 3.300 hectáreas reforestadas en 10 provincias españolas, Liébana es el segundo proyecto de reforestación que Land Life lleva a cabo en Cantabria.
Beneficios
El proyecto permitirá restaurar estos montes de Liébana antes poblados por especies no autóctonas como el pino radiata, empleados para producción de madera y que, tras su corta quedando un terreno baldío, conviene reforestar. Las nuevas masas resilientes serán, en unos rodales mezcla de cerezo, alcornoque, roble, castaño, serbal, abedul, arce y haya, y en otros, masa pura de alcornoque, cuyo corcho podrá ser también objeto de aprovechamiento sostenible.
La reforestación de Land Life proporcionará opciones de gestión sostenible del monte a ambas Juntas Vecinales, ayudará a mantener los beneficios ecosistémicos de la zona y favorecer sus condiciones climáticas. La plantación también mejorará el suelo gracias a la infiltración y captación del agua, en una zona de Cantabria con un microclima más seco.
Además, la plantación favorecerá la biodiversidad del entorno, beneficiará el hábitat para la fauna silvestre y ayudará también a la conservación del oso pardo. La creación de un bosque mixto aumenta la disponibilidad de alimento, lo que mejora las condiciones de una especie que se encuentra en peligro de extinción en nuestro país.
Fases
Land Life crea bosques mixtos autóctonos de media densidad, compuestos por diferentes especies, características clave para crear bosques resilientes, capaces de hacer frente a las amenazas del cambio climático y ser menos vulnerables a la propagación de incendios y plagas.
Con el fin de generar beneficios duraderos para las zonas rurales, Land Life trabaja de la mano con las comunidades locales. En esta ocasión, se emplea planta de alcornoque de la región de procedencia Liébana, producida por el vivero Centro Forestal La Flor de Villapresente, de la Dirección General de Montes y Biodiversidad del Gobierno de Cantabria.
El proyecto se encuentra actualmente en fase de ejecución, se ha preparado el terreno con el ahoyado previo a la plantación. Los trabajos se iniciaron en la pasada primavera y la plantación finalizará previsiblemente este diciembre.
Posteriormente, y durante cuatro años, Land Life se focalizará en el mantenimiento y seguimiento de la plantación para garantizar la supervivencia y crecimiento óptimo del nuevo bosque.
Una vez finalizada la plantación, Land Life realizará en la zona talleres y actividades educativas sobre la conservación de los bosques y la biodiversidad que éstos aportan para sensibilizar y fomentar la preservación del entorno natural y del futuro bosque.
Oportunidades
El patrimonio forestal de Cantabria se distingue por su tradición en la producción de madera. Con esta realidad presente, el proyecto de Land Life mejora el equilibrio entre las plantaciones productoras de madera y las que aportan otros beneficios ecosistémicos o fomentan otros usos como el aprovechamiento del corcho. De esta forma, se potencian nuevas oportunidades de desarrollo rural con la opción de proporcionar, en un futuro, ingresos a los propietarios de los montes con el uso micológico, apícola o turístico del bosque.
Tecnología
Land Life explora de forma constante nuevas técnicas que permitan asegurar la viabilidad de la plantación con el menor impacto posible en el terreno. En el proyecto de Liébana se emplean drones para estudiar el terreno en la fase de diseño, y posteriormente para supervisar la ejecución y analizar el crecimiento de los árboles. La tecnología GIS ha permitido recopilar datos de campo, analizar mapas y supervisar las operaciones con la teledetección de forma muy precisa.
Para la fase de mantenimiento y seguimiento, Land Life cuenta con una aplicación que incorpora GPS que registra e incorpora información de cada árbol. Unos datos que permiten analizar en qué condiciones crece el bosque y qué mantenimiento requiere para conservar la plantación en las mejores condiciones.
En esta ocasión, con el objetivo de reducir el daño de animales silvestres y favorecer el crecimiento vigoroso de las plantas, se utilizarán nuevas técnicas de aplicación de biorepelentes.
El proceso de plantación es liderado y supervisado en todo momento por un equipo de ingenieros forestales expertos en restauración ambiental. Además, Land Life trabaja junto a los propietarios y los gestores de las tierras para el desarrollo y el mantenimiento de las plantaciones.