Murió el ciclista accidentado el sábado durante una prueba en Arenas de Iguña

Municipio de Arenas de Iguña. R.A.

Un barco pesquero sufre una vía de agua en el puerto de Laredo

El ciclista herido de gravedad tras sufrir una fuerte caída el sábado en Arenas de Iguña cuando competía en la prueba Cantabria Bike Race ha fallecido en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla, donde permanecía ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) desde el accidente.

La organización de la prueba y la Federación Cántabra de Ciclismo han confirmado su fallecimiento ayer y trasladaron sus "más sinceras condolencias a la familia y amigos en este difícil momento". "Lamentamos profundamente esta pérdida y nos ponemos a su disposición para brindarles el apoyo que necesiten".

Además, han decidido guardar un minuto de silencio al inicio de todas las pruebas que se celebrarán en la comunidad autónoma durante esta semana.

La organización decidió el sábado, tras el accidente, suspender la última etapa de la prueba que se iba a celebrar el domingo en Cartes.

El ciclista resultó herido de gravedad tras sufrir una fuerte caída a la altura de la fábrica de Andros, en Arenas de Iguña, y fue trasladado al Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. A su llegada al lugar de la caída el personal de la ambulancia ya tuvo que realizar técnicas de reanimación a la víctima porque estaba inconsciente.

Pesquero

Un pesquero sufrió ayer una vía de agua en el puerto de Laredo y tuvo que desaguar, aunque finalmente pudo hacerlo con sus propios medios.

Barco en el puerto de Laredo.

Aun así, los Bomberos del Servicio de Emergencias 112 del Gobierno de Cantabria ayudaron a la tripulación a la extracción de agua, y una vez comprobaron que se podía actuar únicamente con los recursos del barco se retiraron.

Previamente, dejaron a los tripulantes una bomba de achique de apoyo por si fuera necesaria, según informa el 112 en su perfil de X.

Santoña

La Policía Local de Santoña recibió un aviso del servicio de emergencias del 112 sobre un incendio, motivo por el que acuden al lugar. Vecinas informan a la patrulla que en el primer piso hay una vivienda que emana humo negro, y que “creen que hay un vecino dentro, que han llamado a la puerta pero que no les han respondido”.

Debido a la situación y viendo que la vivienda no para de echar humo se intenta entrar por la fuerza.  Tras varios golpes puerta se escucha a alguien en el interior y posteriormente el propietario abre la puerta.

Una vez dentro, se accede a la vivienda, dentro en la cocina se encuentra otro vecino, el cual alertado por el humo consiguió acceder por la ventana del piso colindante y con un extintor consiguió sofocar el fuego originado en la cocina.

Tras el suceso se dan novedades al Servicio del Emergencias del 112 de Cantabria y se anula la dotación de Bomberos de Laredo la cual estaba otro servicio, pero se mantiene la dotación de Santander para hacer la comprobación de la cocina y comprobar si la instalación eléctrica ha podido verse afectada.

El incendio fue producido por un error humano y gracias a la rápida actuación del vecino no tubo graves consecuencias personales.

El dueño del inmueble fue trasladado en ambulancia al centro de salud para ser valorado por la gran cantidad de humo inhalado y queda una patrulla de la Guardia Civil en el inmueble a la espera de bomberos para asegurar la vivienda.