Condenado un exprofesor del colegio La Salle, en Santander, por posesión de pornografía con menores
El Juzgado multa con 900 euros al implicado y la inhabilitación para cualquier profesión en la que mantener contacto con menores
El Juzgado de Instrucción número tres de Santander ha condenado a un exprofesor del colegio La Salle de la capital cántabra por posesión de pornografía con menores "para uso propio" a una multa de 900 euros y a la inhabilitación para cualquier profesión que conlleve un contacto regular y directo con menores de edad durante dos años y cuatro meses.
Igualmente, tiene prohibido utilizar programas o aplicaciones o redes durante un periodo de tres años y cuatro meses.
La sentencia, fechada en marzo de este año, rebaja las penas que solicitaba el fiscal por conformidad de las partes que, una vez conocido el fallo, han manifestado su decisión de no recurrir, por lo que la sentencia es firme.
La misma declara probado que el exprofesor es autor de un delito de "posesión de material pornográfico para propio uso en cuya elaboración se hayan utilizado a menores de edad" y también le condena al pago de las costas.
Según relata la sentencia, en febrero de 2021, el Grupo de delitos económicos y tecnológicos de la Policía Nacional de Santander realizó una operación de rastreo para localizar direcciones IP que habrían tenido acceso o habrían compartido contenidos relacionados con la pornografía infantil en Internet, entre las que se encontraba la lína de la que es titular el acusado.
El día 21 de octubre de 2021, el Juzgado de Instrucción tres de Santander acordó el registro en su domicilio y el citado grupo policial se incautó de distintos dispositivos de almacenamiento, en ellos un disco duro con más de 400 archivos de vídeo que reproducían imágenes de menores realizando comportamientos de naturaleza sexual en los que se ve, entre otras conductas, a algunos de ellos desnudos en posturas lascivas, enseñando los genitales y manteniendo relaciones sexuales.
Por su parte, el director de La Salle Santander, José Manuel Merino, ha enviado una comunicación a las familias del centro en la que asegura que ni el colegio, ni ninguno de sus alumnos "han estado nunca implicados en la acusación y posterior condena" del antiguo profesor del colegio.
Por ello, y por no haber tenido "ninguna información ni requerimiento" por parte de la autoridad competente en este proceso, el centro "se ha mantenido al margen de este tema, continuando con toda normalidad y profesionalidad con la actividad académica".