Vox enmienda a la totalidad el presupuesto que endeuda a los santanderinos y subvenciona chiringuitos ideológicos de la izquierda

El portavoz de Vox, Guillermo Pérez-Cosío, explica su enmienda.

El portavoz municipal, Guillermo Pérez-Cosío, señaló que contempla 1,3 millones de euros en sueldos de los concejales

El concejal de Vox en el Ayuntamiento de Santander, Guillermo Pérez-Cosío, ha presentado una enmienda a la totalidad al presupuesto municipal de 2023.

Así lo ha indicado el portavoz de la formación en una rueda de prensa destacando que “las cuentas se han presentado fuera de plazo” y ha lamentado que la alcaldesa Gema Igual (PP) siga pidiendo préstamos a los bancos mientras destina fondos a terceros países para “su desarrollo” o las subvenciones a chiringuitos ideológicos.

“El aumento del presupuesto municipal supone una quiebra de cara al futuro del Ayuntamiento y por ello desde Vox nos vemos obligados a presentar esta enmienda a la totalidad”, ha afirmado.

“El proyecto contempla un desmesurado gasto político con pérdidas partidas que ascienden a más de 2,8 millones de gastos de los Órganos de Gobierno y un gasto cercano a los 1,3 millones de euros en sueldos de los concejales o más de 800.000 euros en salarios de su personal eventual y asistentes, lo que resulta del todo injustificable”, ha explicado.

En otro de los motivos, Pérez-Cosío califica el documento económico como electoralista y con un Partido Popular que es responsable de regar con dinero de los santanderinos a chiringuitos ideológicos de la izquierda y mientras tanto solo se destinan 21.112 euros a la Asociación de Paralíticos Cerebrales (Aspace) o 6.000 euros a la Asociación Cántabra de Esclerosis Múltiple “Acdem), que realizan una gran labor.

El PP está más preocupado en rendir pleitesía a sus socios Ciudadanos y en no disgustar demasiado al PSOE en vez de gobernar para solucionar los problemas reales de los santanderinos”, ha declarado.

Asimismo, en estas cuentas hay un gasto en actuaciones que “no son competencia del Ayuntamiento, que resultan ineficientes y en materias que no repercuten positivamente en beneficio de los santanderinos”. Un ejemplo claro es que se dotan con escasos 750 euros en el convenio UCEM y en cambio se destinan 50.000 euros a la CEOE y cerca de 1’3 millones de euros de inversiones en “programa estrategia urbana” que realmente no tendrán una repercusión en la creación de empleo.

Pérez-Cosío señala que “el proyecto no contempla otras medidas que sí inciden positivamente en la creación de nuevas empresas y puestos de trabajo, como incrementar las ayudas y beneficios fiscales a los comerciantes y empresarios locales o la rebaja de tasas e impuestos municipales que reactiven la economía santanderina”.

Inversiones

En cuanto a las inversiones, durante el pasado año se tenían que haber ejecutado 65,68 millones de euros de inversiones, pero resulta que solo se han ejecutado 6,15 millones de euros durante el primer semestre de 2022, es decir, en seis meses apenas se ha ejecutado un nueve por ciento de lo inicialmente previsto para todo el año. “Esta incapacidad de gestionar y llevar a cabo las inversiones previstas ya la sufrimos en el año anterior cuando a cierre del ejercicio 2021, se produjo un exceso de financiación de 23 millones de euros por no haber ejecutado las inversiones prometidas a los santanderinos, y cuya cantidad que viene a engrosar el endeudamiento municipal”, ha dicho.

Pérez-Cosío ha dejado claro que “no vamos a ser cómplices de un presupuesto que no contemplan la situación de crisis de nuestras familias y que solo buscan el eslogan electoral y la promoción personal del equipo de Gobierno”

“Tampoco encontramos ni un solo ahorro en gasto superfluo ni en la eliminación de entes u oficinas municipales sin demanda social o en políticas generadoras de pérdidas continuadas todos los años, pero sí se aumenta la estructura municipal por encima de la pasada legislatura”, apunta.

Por último, el concejal de Vox ha insistido que en estos presupuestos “el gasto público no está orientado a impulsar la recuperación de la actividad económica, el empleo y a mitigar los efectos de la crisis entre los más desfavorecidos, sino que se orienta hacia un gasto político para cumplir una agenda propagandística sustentando la ideología de izquierda que tanto cuesta de entender en un Gobierno popular y con el sesgo descaradamente electoralista de cara a mayo”.