Nuevo Libe acudirá a la Feria de Santoña con anchoa ahumada y a la italiana
La empresa, fundada en el año 2004, participará en la cata del domingo, día 30 de abril
La conservera santoñesa Nuevo Libe acudirá este año a la Feria con dos nuevos productos, por una lado la anchoa ahumada y por otro lado a la italiana, un filete de mariposa con piel en aceite de oliva y formato hansa.
Esta es la novedad que presenta este año esta empresa que tendrá su expositor en el recinto de la Plaza de San Antonio y en el que los visitantes podrán comprar y degustar anchoas, bonito y relanzón.
Siempre bajo su lema ‘Nuestro barco, nuestras conservas’, nació la conservera de pescado Nuevo Libe en 2004 y así se presenta un año más en la Feria de la Anchoa de Cantabria que acogerá Santoña los días 28, 29 y 30 de abril, donde además participará, como en otros 18 años, en la cata de anchoas del domingo.
El año pasado, tras volverse a organizar la Feria después de la pandemia, consideran que fue positiva. “Costó arrancar el viernes, pero el sábado y el domingo se trabajó bien”, recordó su gerente, Ignacio Pacheco Quirós. Para este año, la afluencia de visitante dependerá también del tiempo, si la climatología acompaña, habrá gente, comentó.
La empresa lleva acudiendo a la Feria desde el año 2005, cuando se instaló en la zona del Secadero, pero a su juicio considera la Plaza de San Antonio el lugar ideal para acoger esta iniciativa que debería buscar la manera de crecer, involucrar más al pueblo y darle más difusión.
Respecto a la organización, Nuevo Libe incide en que esta iniciativa se tiene que organizar con más tiempo y preparar una serie de actividades complementarias, como pueden ser la presencia de un chef que enseñe a elaborar pinchos o como el año en que se organizó el récord Guinness de sobar anchoas.
En cuanto a la costera del bocarte, en 2022 se pescó bastante bocarte de tamaño grande y pequeño, de tal forma que faltó mediano y, aunque no se llegó a capturar todo, ya que quedó un millón de kilógramos en la mar, la valoración es satisfactoria.
Inmersos en la costera de este año, ha entrado pesca grande hace unos días, pero el precio es caro, entre 3,5 y cinco euros el kilogramos.
A ello, Ignacio Pacheco, suma la situación del sector, que es complicada, con el aumento de las materias primas, como el aceite, que se ha incrementado un 46 por ciento; el aluminio, un 50 por ciento, y los sueldos, un 16 por ciento. Y aunque han aumentado los precios de los productos, no ha sido en la misma proporción, motivo por el que el sector se encuentra en una situación complicada, indicó.
Productos
Ubicada en el polígono de Santoña, la empresa se fundó con la idea inicial de trabajar la anchoa en salazón, pero después optó por elaborar anchoas, aunque al coincidir con la veda que sufrió el sector y trabajar en Croacia, Nuevo Libe también apostó por adquirir maquinaria para introducir en el mercado bonito, verdel y relanzones.
Una empresa familiar que trabaja de forma artesanal, solo con pesca del Cantábrico y en un 90 por ciento con pesca propia, procedente del barco pesquero Nuevo Libe, al que debe su nombre, explica su gerente.
A partir de ahí no solo diversificó su oferta, con atún rojo, pisto o diferentes pudins, tales como de anchoa, cabracho, bonito, abacanto, langosta, sino que al mismo tiempo amplió sus instalaciones de 200 metros cuadrados a 500.
Hoy en día ofrece trabajo a una media de 17 empleados al año y aunque, en otras ocasiones, ha estado presente en Alimentaria en Barcelona, este año solo participará en la Feria de la Anchoa de Cantabria.
Con tres puntos de venta de sus productos en Santoña, Ignacio Pacheco fue anteriormente pescador, durante 18 años, en los barcos Ispizua Uribarri, San Roque Divino y como no, en el Nuevo Libe.
La empresa que se ha decantado por trabajar con anchoa del Cantábrico, considera que la implantación del Índice Geográfico Protegido está bien, aunque también se beneficien Galicia, Asturias y País Vasco.
Su gerente apuesta por poner en marcha un sello de calidad de la anchoa de Santoña. “Sería con anchoa del Cantábrico, de la costera de primavera y elaboradas en Santoña, el nombre ya lo tenemos, pero se deben implicar todas las conserveras”, señaló.