Santoñeses y la Plataforma en Defensa del Río Asón reclaman una solución urgente a los vertidos sin tratar en la Marisma

El Grupo municipal de Santoñeses y la Plataforma para la Defensa del Saneamiento del Río Asón han reclamado una solución urgente al Ministerio de Transición Ecológica para evitar los vertidos sin tratar en la Marisma de Santoña, Victoria y Joyel.

Ambas partes aseguraron que siguen la situación vivida a expensas del proyecto del subfluvial de Laredo-Santoña, una obra fallida hace tiempo, y de los colectores del Asón y de la Ría de Rada, en Voto.

El candidato a la Alcaldía, Jesús Gullart, mostró su apoyo al trabajo de la Plataforma que busca repercutir de forma favorable en el medio ambiente y los vecinos de su zona y también en beneficio de Santoña.

De hecho, voluntarios de este colectivo han limpiado recientemente la playa del Regatón, en Laredo, y han retirado 120 kilogramos de vertidos y más de 385 de toallitas.

Ante esta situación, la Plataforma en Defensa del Saneamiento de la Ría Asón se ha mostrado crítica por el silencio del Gobierno de Cantabria y por difundir su patrimonio y medio ambiente en la feria de turismo de Fitur a pesar del desastre medioambiental de los vertidos en la Cuenca del Bajo Asón y las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel.

Una de las iniciativas que ha llevado a cabo este colectivo es la presentación de una pregunta parlamentaria ante la Comisión Europea, elevada por el eurodiputado Jorge Buxadé Villalba (ECR-Vox) como continuación a las actuaciones ya promovidas en el Parlamento de Cantabria ante la pasividad del Gobierno Autonómico.

“Estaremos pendientes de las respuestas de la Comisión Europea, toda vez que consideramos de suma gravedad la cantidad, volumen y demora en el tiempo de estos vertidos de aguas residuales sin tratar, así como el desastre medioambiental que acarrea en la Cuenca del Bajo Asón y en las decenas de miles de paisanos que viven en ella”, señalan.

Cursos

Por otro lado, el Grupo municipal de Santoñeses apuesta por modernizar el pequeño comercio y la hostelería en  Santoña mediante la creación de una convocatoria para impartir cursos destinados a la  implantación de nuevas tecnologías y digitalización.

A esta formación, se añadirían otras acciones formativas en otras áreas como logística, marketing, comunicación, gestión económica, inglés básico aplicado a la actividad comercial, entre otras, que  son necesarias para afrontar el cambio de hábitos del consumidor tras la covid-19.

Para llevar a cabo esta propuesta, sería necesario recabar la ayuda y colaboración de la  Cámara de Comercio de Cantabria y de la Federación de Comercio de Cantabria  (Coercan), por su amplia experiencia formativa en estos sectores.

Santoñeses considera que las previsiones para el pequeño comercio de cara al nuevo año que acaba de comenzar  no son muy positivas.

Según los datos de la Unión de Trabajadores Autónomos de  Cantabria, 224 comercios cerraron en la Comunidad Autónoma en 2022 y las  prospecciones para este 2023 señalan que pueden ser entre 300 y 500 los pequeños  comercios y locales de hostelería en riesgo de acabar cerrando sus puertas, de forma definitiva, a lo largo del año.

Según la propia asociación de autónomos, una de las claves para revertir esta situación, y como complemento a las ayudas económicas por parte de las Administraciones públicas, serían las acciones formativas promovidas por dichas administraciones, especialmente  aquellas orientadas a la digitalización.

“Se trata de formar a los comerciantes y hosteleros  y dotarles de mecanismos de producción que sean mucho más eficaces y rentables”, comentaron.