El juicio contra un acusado de, presuntamente, abusar de una menor a la que dio clases de tenis de mesa será el miércoles
También se juzgará a otra persona por un posible abuso de una menor, de cinco años de edad, a la que impartió clases de multideporte
El juicio contra un acusado de, presuntamente, abusar de una menor a la que dio clases de tenis de mesa será el miércoles, día 26 de abril, a las 10.00 horas, en la Audiencia Provincial de Cantabria.
Según se desprende del escrito de la Fiscalía, el acusado se encontraba impartiendo unas clases a una menor, de 16 años, cuando “encontrándose a solas y con el pretexto de corregir sus posiciones y así mejorar la técnica, con ánimo de satisfacer sus instintos sexuales le propinó en dos ocasiones varias palmadas en el glúteo”.
“Con idéntico pretexto y ánimo le besó en el cuello tocándole los pechos y poniendo sus manos en la zona lateral de la pelvis”, continúa el escrito.
Consecuencia de estos hechos, el Ministerio Público explica que la menor se vio “muy afectada, manifestando depresión, ansiedad social, con trastorno de estrés postraumático”.
Los hechos narrados constituyen, a juicio de la Fiscalía, un delito de abusos sexuales merecedor de una pena de tres años de prisión, con inhabilitación para cualquier profesión que conlleve contacto con menores durante ocho años y prohibición de acercarse y comunicar con la menor durante igual periodo.
En concepto de responsabilidad civil, el Ministerio Público solicita una indemnización para la menor de 6.000 euros por los daños morales causados.
Ese mismo día y a las 11.30 horas también se juzgará a otro acusado de, posiblemente, abusar de una menor, de cinco años de edad, a la que impartió clases de multideporte.
Según la Fiscalía, el acusado sentó a la menor en un banco del polideportivo diciéndole que estaba castigada.
Entonces, “se sentó a su lado y, tras levantarle el pantalón y la braguita, le metió la mano en el interior y le tocó la vulva con los dedos, con ánimo de satisfacer sus deseos sexuales”.
La niña contó lo ocurrido a sus padres, manifestándoles que no quería volver a esa actividad deportiva.
El Ministerio Público considera los hechos un delito de abuso sexual, merecedor de una pena de tres años y medio de prisión, libertad vigilada durante cinco años e inhabilitación para desempeñar actividad de profesor, monitor o coordinador de deporte con menores durante seis años.
Además, considera que el acusado debe indemnizar a la víctima en 4.000 euros por el daño moral ocasionado.
Por su parte, la acusación particular que ejerce la familia de la menor pide que la pena sea de seis años de prisión, la libertad vigilada de tres años y la inhabilitación para oficio con menores de cinco años.
Junto a ello, solicita que se establezca la prohibición de aproximarse y comunicar con la menor por un periodo de once años.
En concepto de responsabilidad civil, eleva la cuantía de la indemnización a 25.000 euros, “dado el mal causado y la gravedad del mismo, la edad de la afectada” y la “posible afectación durante su vida”.
La defensa del acusado y de la empresa que le contrataba –responsable civil subsidiaria- se muestran disconformes con estas acusaciones.
Drogas
El miércoles, día 26 de abril, pero a las 9.30 horas, comenzará un juicio contra un acusado de, presuntamente, traficar con cocaína en las calles de Santander.
Para el Ministerio Fiscal el acusado se encontraba en septiembre de 2021 a bordo de un vehículo hablando con otra persona que tenía el brazo introducido en el coche por la ventanilla.
Al percatarse de la presencia policial, ambos salieron huyendo y el vehículo del acusado fue interceptado. En el cacheo, encontraron al acusado seis bolsitas de plástico con cocaína que guardaba en el dobladillo del pantalón, y otras diez con la misma sustancia en un bolso que estaba en la puerta del vehículo.
La droga intervenida tenía un peso total de 6,6 gramos. Además, también se encontraron 275 euros fraccionados en billetes en el interior de la cartera del acusado.
El Ministerio Fiscal le considera autor de un delito contra la salud pública de sustancias que causan grave daño, merecedor de una pena de tres años de prisión y 500 euros de multa.
