La última obra del artista fotográfico Nicolás Grospierre llega a la Biblioteca Central de Cantabria
Presentado en el MAS el catálogo de la exposición temporal ‘Dibujos transitivos’ de José Gallego
La Biblioteca Central de Cantabria (BCC) expone estos días la última obra del artista Nicolás Grospierre titulada ‘La Biblioteca’ después de que el coleccionista cántabro haya cedido por un año la obra al Gobierno de Cantabria, por medio de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte, para su exposición en este espacio público.
Elaborada en 2007, ‘La Biblioteca’ es una colección de fotografías que retrata algo más que una biblioteca específica para reflejar un intento de representar lo que constituye la esencia de la idea de biblioteca, basándose vagamente en la novela de Jorge Luis Borges ‘La biblioteca de Babel’, donde el autor describe el universo como una biblioteca infinita y cíclica’.
En concreto, Borges muestra en su novela ofrece dos aspectos fascinantes y fundamentales de la idea de biblioteca: por un lado, un lugar donde se reúnen libros es algo potencialmente infinita porque los libros y, por lo tanto, el conocimiento, no conocen fronteras y están en constante expansión, y, por otro lado, que una biblioteca puede contener un libro sobre bibliotecas e incluso la lista de todos los libros de esa biblioteca en particular, lo que significa que una biblioteca es simultáneamente el contenedor y el contenido de la misma materia.
Por lo tanto, la obra fotográfica del suizo Grospierre es un intento de mostrar, por medio de una instalación fotográfica, la biblioteca como una colección infinita de libros, pero que puede estar contenida en un solo libro.
Antes de exponerse en la Biblioteca Central de Cantabria, la obra se ha mostrado en dos exposiciones en Varsovia y se compone de varias fotografías sobre libros, estanterías de biblioteca, paredes y pasillos interminables de libros, un edificio de biblioteca, un libro real y fichas de biblioteca, además de una proyección de vídeo.
Acto
El Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Santander y Cantabria (MAS) presentó, en el EspacioMeBAS, el catálogo de la exposición temporal ‘Dibujos transitivos’ de José Gallego, que aún puede visitarse en el museo santanderino hasta el mes de marzo.
La concejala de Cultura, Noemí Méndez, ha sido la encargada de dar a conocer los detalles de la publicación durante una rueda de prensa en la que ha estado acompañada por el artista y el director del museo, Salvador Carretero.
La responsable municipal ha reconocido la importancia de este catálogo, compuesto por 80 dibujos, y ha asegurado que se trata de un “maravilloso” trabajo de Gallego en el que profundiza sobre todos los personajes que ha ido pintando durante varios años.
El catálogo, con textos de Enric Mira y Pedro Medina, ha sido diseñado por María José Arce y tiene el objetivo de poner en valor y hacer perdurar en el tiempo la colección de dibujos realizados al grafito sobre papel que se exponen en la pinacoteca municipal.
Por su parte, Gallego ha afirmado que este catálogo es “un tesoro” que ha contado con la participación de varias personas que le han dado su toque personal y artístico.
José Gallego ha sacado por primera vez de la intimidad de su estudio esta serie de autorretratos, “los rostros trastocados de algunos de los artistas que hicieron posible una época, el Manierismo y el Barroco, en la que se manejaron nuevos géneros y nuevas técnicas de la pintura, mientras se gestaba la individualidad moderna”.
El artista era conocedor de su admirado y maravilloso legado pictórico, pero de muchos de sus protagonistas no había percibido su rostro o su mirada. La idea de ahondar en este vacío empezó frente al autorretrato de Velázquez. Después, se topó con las miradas de Murillo y Fabritius. Y así fueron surgiendo y almacenándose en su memoria estas y otras miradas, un rimero de sensaciones plasmadas a lo largo de los últimos 15 años en estos dibujos ejecutados con brillante destreza.
Gracias a la generosidad de Gallego, el MAS expone los autorretratos de la pintura de los siglos XVI y XVII, desde Tiziano hasta José Ibarra, contando con Sánchez Coello, Tintoretto, Lavinia Fontana, Rembrandt, Murillo, Clara Peters, Van Dyck, Velázquez o Bernini, junto a muchos otros nombres destacados y otros menos conocidos.
Esta publicación se detiene como lo hace Gallego en la complejidad de la identidad y la condición humana, y en cómo el artista prescinde de los elementos accesorios, acentuando el estudio psicológico de los protagonistas. Queda algún sombrero, algún collar y fragmentos de la vestimenta, pero lo principal es concentrar toda la atención en el rostro.
