“Se le llamó tonto y gilipollas a aquel señor y no viene en el acta”, increpó el PRC al alcalde del PP antes de la moción de censura en Rionansa
El equipo de Gobierno y la oposición se acusaron de realizar grabaciones y tener paralizado la redacción del Plan General de Ordenación Urbana
“Se le llamó tonto y gilipollas a aquel señor y no viene en el acta”, increpó el portavoz del Grupo municipal del PRC, Pedro Manuel González, al alcalde del PP en ese momento en Rionansa, José Miguel Gómez, antes de sufrir la moción de censura.
Este era el ambiente que se vivía en las sesiones plenarias de este municipio antes de que regionalistas y socialistas se uniesen para sustituir al PP del Gobierno municipal con acusaciones de realizar grabaciones, la aprobación de las cuentas generales de 2018 y 2019 y tener paralizado la redacción del Plan General de Ordenación Urbano (PGOU).
“Después de una reunión de juntas vecinales también se faltó el respeto a una persona fallecida y no apareció en el acta”, insistió el edil del PRC, quien añadió que “simplemente quiero hacer hincapié en que un alcalde debe tener más respeto a los vecinos y a cualquier representante público”.
José Manuel González, por entonces regidor municipal, declaró que “en ningún momento desde su cargo se ha faltado el respeto a ninguna persona, otra cosa es que se quiera transmitir esa idea”.
En su opinión el acta lo elabora la secretaria municipal y las modificaciones pueden hacer referencia a una votación o decisión adoptada. “El portavoz ha dicho lo que tenía que decir y quedará reflejado en este acta”, remarcó.
Cuentas municipales
La aprobación de la cuentas generales de 2018 y 2019 en el presente ejercicio 2021 también originó el enfrentamiento entre el equipo de Gobierno y la oposición antes de que el socialista José Luis Herrero lograse la Alcaldía con el apoyo de los cuatro concejales regionalistas.
En este punto, el PRC recordó al concejal popular, Marcos Pérez, que en un Pleno del año 2019 se mostró muy indignado y escandalizado por el hecho de que no se aprobasen cuentas generales de un año o dos anteriores como si fuese algo muy relevante para el Ayuntamiento, “mientras aquí estamos aprobando la cuentas de 2018 y 2019”.
El edil del PP, Marcos Pérez, explicó que esta situación se debe al desastre que hubo anteriormente en el Gobierno municipal y que ahora están arreglando, mientras los regionalistas recordaron que estuvieron sin secretario durante un año y medio. “Criticaste algo que no era político, sino administrativo y no tuviste comprensión con los trabajadores”, matizó el portavoz del PRC.
Además, el concejal regionalista declaró que “esto sucede en ayuntamientos pequeños cargados de trabajo, donde la secretaria es interventor y tesorero y aun así el PP lo utilizó políticamente, cosa que no queremos hacer nosotros”.
Por alusiones, Marcos Pérez reprocho al portavoz del PRC que no se erija en defensor de los trabajadores “porque algunos tienen problemas gordísimos por alguna que le hiciste. En su momento coló, pero ya no cuela”.
Las cuentas se aprobaron por unanimidad, sin reclamaciones y con el informe favorable de la Comisión de Cuentas.
Aquí no acaban los enfrentamientos entre los representantes municipales en el Consistorio de Rionansa. De hecho, el portavoz regionalista, Pedro Manuel González, se quejó de que el acta de los Plenos no recoge faltas de respeto e insultos y que el alcalde pide a la secretaria que debe plasmar en el acta y que no. “Aquí por una manipulación de una palabra se llevó el asunto a la Fiscalía, cuando la secretaria reconoció que no sabía lo que se había dicho, mientras el alcalde se dirigió de forma amenazante al técnico municipal delante de todos para decirle que lo pusiera en el acta”, recordó.
El regidor municipal en ese momento, José Miguel Gómez, salió al paso de las acusaciones y dijo que “esto es el mantra de todos los plenos. No puedo decirle a la secretaria cómo tiene que elaborar el acta y ninguno lo permitiría. Yo no sé qué harías tú cuando eras alcalde”.
Asimismo, señaló que “nunca ha dicho a la secretaria que incluyese unas palabras que nunca se habían dicho, solo pedí que constará una expresión, ya que el error lo cometisteis vosotros, la palabra la escuchamos todos y no hubo manipulación”.
Por otro lado, el máximo responsable municipal hizo referencia a que el PRC acusó al edil popular, Marcos Pérez, de grabar plenos, cuando en una sesión plenaria alguien dejó el móvil grabando, así como una junta de gobierno y una reunión que no eran públicas y después lo ha usado para sembrar cizaña, buscar enemistad entre varias familias, algunas suyas directas. “Es inconcebible, no vengas tú ahora a reprochar que se te grabe”, puntualizó.
Rescisión del contrato
Tras rescindir de forma unilateral el contrato al redactor del Plan General de Ordenación Urbano por la falta de confianza del equipo de Gobierno municipal en el año 2018, el PRC preguntó sobre los posibles avances realizados.
El alcalde afirmó que ese plan urbanístico se boicoteó y ahora vienen los regionalistas a reclamar que cómo va el PGOU”.
“Lo que has dicho por alusiones es muy grave y es totalmente falso”, aclararon desde el PRC.
Asimismo, explicaron que el profesional estuvo sentado frente de la secretaria y reclamó que faltaban de pagarle 15.000 euros, algo que se le negó a pagar porque la secretaria le dijo que no tenía acreditado esa reclamación”.
El PRC reveló que el plan “no tuvo los informes positivos del Gobierno, de Medio Ambiente, se tuvo que modificar y luego vinieron los periodos en los que no tuvimos secretario y era muy complicado”. Al mismo tiempo, argumentaron que llegó un momento en que era inviable porque ese profesional no estaba dispuesto a hacer determinadas cosas que se le pedía desde el Gobierno de Cantabria y se decidió rescindir el contrato tal y como la secretaria dijo.
Para finalizar, el PRC realizó un ruego y señaló que no se manipule, ya que cuando el alcalde habla de las instalaciones deportivas que está poniendo en funcionamiento, tiene un pabellón cerrado, está segando un campo de fútbol cuando nadie juega y tiene la piscina con informes desfavorables de Sanidad, la pista de pádel abandonada y sin gestión alguna.