'Alice in bordeland' reta al 'Juego del calamar'
El fenómeno de las miniseries ha cosechado un gran éxito entre los amantes al cine y se han instaurado, gracias a ciertas plataformas, en las pantallas de los televisores de nuestras casas.
Si ‘Gambito de dama’ provocó un mayor interés de las mujeres por el ajedrez y por iniciarse en su práctica, el gran aumento de las ventas de la novela de Walter Tevis, el incremento en la compra de los tableros de ajedrez, así como de las consultas de este deporte en los buscadores en Internet, en los últimos meses el ‘Juego del calamar’ se ha llevado el protagonismo.
Basada en unos juegos tradicionales en la calle que deben superar quienes han decidido participar para ganar una gran suma de dinero y evitar la muerte, la miniserie, violenta para el público infantil, ha suscitado el interés de niños y jóvenes que han logrado acceder a sus capítulos para después imitar el comportamiento de los actores.
Incluso, con motivo de la fiesta de Halloween, algunos han llegado a disfrazarse con el buzo y la máscara de los guardianes y, en ocasiones, asesinos de los concursantes. Un contenido que no es acorde a su edad, se recomienda para mayores de 16 años, y sin embargo hay padres que han permitido su visión.
Pues en esta circunstancia, que ha trascendido en los medios de comunicación y en los colegios, otra miniserie ‘Alice in bordeland’ ha surgido para retar al ‘Juego del calamar’.
Coinciden en que sus protagonistas deben superar varias pruebas y en la violencia de sus escenas, pero mientras en el ‘Juego del calamar’ se basan en juegos tradicionales infantiles y globales, en ‘Alice in bordeland’, los jóvenes reciben las instrucciones en sus smartphones, los juegos se basan en la lógica y los concursantes perdedores son ejecutados por medio de un láser vía satélite o sufre una explosión de su collar en el cuello.
No se puede olvidar tampoco que los dos títulos critican a una sociedad corrupta y dejan al espectador con un final en el que esperan una segunda parte, las cuales verán la luz.
En lo que se refiere al comienzo, difieren en estas miniseries. Mientras en el ‘Juego del calamar’ se da a conocer la vida de su protagonista, su situación y sus penurias, en ‘Alice in bordeland’ sucede un fenómeno, sin explicación racional, que conduce a los protagonistas a competir en las pruebas en una ciudad casi desierta. Aquí el misterio es mayor sobre la situación que se ha generado, una trama de ficción, frente a la codicia y la ambición humana por el dinero del ‘Juego del calamar’
Y en cuanto a la participación en las pruebas, en una serie lo deciden, sin estar obligados, motivados por un gran premio, el dinero, mientras que en la otra se ven obligados para evitar la muerte.
Y a partir de aquí el debate está servido. Hay quienes consideran que en ‘Alice in bordeland’ las pruebas son imprevisibles, mantienen una mayor tensión y son más complicadas, basadas en el razonamiento y en indicios o enigmas, frente a la sencillez del ‘Juego del calamar’ donde el tiempo fuerza a los participantes a concluir la prueba para no perder la vida.
A ello añaden que transcurre en diferentes escenarios urbanos, frente a la isla del ‘Juego del calamar’, y que aquí el misterio perdura sobre quién o quiénes están detrás de ese entramado, frente a la serie coreana que se descubre casi al final.
Otros se decantan por el ‘Juego del calamar’. Su estética, imitada en Halloween, la originalidad de los juegos tradicionales, un comienzo que da a conocer el pasado del protagonista, un perdedor con deudas que quiere triunfar y tener cerca a su hija, hacen que los espectadores se decanten por esta miniserie, donde la falta de escrúpulos y el ingenio frente al contrincante, para mantener la vida, está más presente.
En conclusión, puedes ver las dos y declinarte por una u otra, pero también conviene esperar a tomar una decisión tras disfrutar de las segundas partes de estas miniseries que están pendientes de su emisión.