jueves. 21.11.2024
El tiempo

Condenado a ocho años de prisión por pedir sexo a cambio de dinero a cuatro adolescentes tras contactar por Instagram

En el acuerdo se tuvo en cuenta la concurrencia de dos circunstancias atenuantes: alteración mental y reparación del daño

Juzgados de Santander. R.A.
Juzgados de Santander. R.A.
Condenado a ocho años de prisión por pedir sexo a cambio de dinero a cuatro adolescentes tras contactar por Instagram

La Audiencia Provincial de Cantabria ha condenado hoy a ocho años de prisión a un hombre por pedir relaciones sexuales a cambio de dinero a cuatro adolescentes tras contactar por Instagram.

El hombre es autor de cuatro delitos continuados de explotación sexual y corrupción de menores, con la concurrencia de las circunstancias atenuantes de alteración mental y reparación del daño, ya que padece una discapacidad mental ligera, ha abonado 450 euros antes de la celebración del juicio y se comprometió a pagar a plazos los 4.000 euros de indemnización a los menores.

Además de la pena de prisión, no podrá acercarse ni contactar con las víctimas durante tres años, se le impone una medida de libertad vigilada de siete años y se le inhabilita para profesión, oficio o actividad que conlleve contacto con menores durante trece años.

Al inicio de juicio, las partes han alcanzado un acuerdo, dado que el hombre ha reconocido los hechos y se ha conformado con la pena mencionada.

Según el relato de hechos de la Fiscalía que ha quedado reflejado en la sentencia, el ahora condenado contactó por medio de una cuenta de la red social Instagram con cuatro chicos, de entre 13 y 15 años de edad, a los que propuso “en numerosísimas ocasiones” encontrarse para mantener relaciones sexuales.

“Con el fin de convencerles de que accediesen a sus reiteradas peticiones, les ofreció diversas cantidades de dinero, que sin embargo los menores no aceptaron”, añade el relato.

Los menores, que cursaban sus estudios en el mismo instituto, denunciaron estos hechos ante la Guardia Civil, lo que derivó en la adopción de una medida cautelar que prohibía al ahora condenado a comunicar con los chicos o acercarse al municipio donde residían.

Podemos

Podemos Cantabria, por medio de su secretario de Educación, Pablo González, ha calificado de “desastre” la gestión de los comedores escolares por parte de la Consejería de Educación, destacando que “hace unos días nos enterábamos del retraso en los pagos a los docentes de los complementos por formación, los conocidos como sexenios, y ahora que el servicio de comedor en decenas de colegios de Cantabria está en serio riesgo”.

Para González, el consejero Sergio Silva (PP) “está dejando muy clara su incapacidad para gestionar la Consejería de Educación: por un lado, tenemos el colectivo de trabajadoras de la empresa que tiene asignado este servicio público y que no han cobrado su sueldo de enero, cosa ya bastante grave, y por otro, la denuncia de que las cámaras frigoríficas están vacías, los frescos no se están suministrando y peligra el servicio de comedor en pocos días, lo cual”, subraya González, “es fruto de la desastrosa gestión del consejero Silva y su director General de Centros”. 

Desde Podemos Cantabria no dudan en afirmar que cada día queda más patente que “al Consejero actual le queda muy grande el cargo, y no descartamos pedir su dimisión y la de todo su equipo por ello”. 

Asimismo, González considera que “dado que la empresa matriz de la que presta el servicio de comedor en estos centros se declaró insolvente en agosto y solicitó concurso de acreedores, la Consejería debería haberse implicado en este asunto para tratar de anticipar un problema que ahora ya es acuciante y grave”. “Estamos hablando de la alimentación de los niños de decenas de colegios cántabros”, enfatiza el responsable morado.

La formación progresista incide en que “todo esto no se habría producido si la Administración se hiciese cargo de la gestión directa de los comedores escolares”.

González concluye poniendo el foco en que la delegación de servicios en empresas privadas, “y esto lo venimos denunciando desde hace años, es más caro tanto en términos económicos como en términos de calidad de los mismos, y lo pagan los de siempre”.