Las murgas de Santoña vuelven a cantar con la presencia de la covid-19 en sus letras

Las murgas adultas del Carnaval de Santoña vuelven a subir al escenario con el fin de buscar un hueco en la final del jueves, día 24 de febrero, y como era de esperar y tras lo sucedido, la covid-19 y la pandemia estarán presenten en sus letras.

Este año empieza con una novedad, la presencia por primera vez en este concurso de la agrupación Las Soberanas. María Casas es una de sus integrantes y ya anticipa que uno de los temas principales es la pandemia, aunque también incluyen otros asuntos que suceden en su pueblo.

“Desde bien pequeñita participé durante años en murgas infantiles, y cuando llegó el límite de edad para pasar a murgas adultas fue muy difícil entrar en una de ellas, ya que solo había agrupaciones de hombres o ya tenían su pequeño grupo formado”, explica.

Siempre tuvo en la cabeza formar una murga adulta con amigas y así poder seguir dando vida al Carnaval de Santoña. Y este pensamiento se llevó a cabo hace dos años. “Aunque al comienzo fue algo difícil, ya que era complicado buscar guitarras y percusión, por suerte tuvimos gente que se implicó y nos ayudó”, recuerda cuando echa la mirada atrás en esos primeros pasos.

Lo mismo dice Alejandro Cordero, de Amigos de Chechu. Natural de Santander y con 40 años de edad, lleva 31 participando con Coloreaducos, Galipoteros y Amigos de Chechu. “Claro que está presente y supongo que en todas las demás agrupaciones. Será el tema por excelencia, pero también recogemos temas nacionales actuales y siempre cae algo a nivel regional y local”, explicó.

Fran Montes, a sus 55 años lleva 42 sobre el escenario y es uno de los veteranos de las murgas. A la hora de explicar su decisión de volver a cantar, hace hincapié en varias razones. Primero, que en el pueblo hace falta un poco de Carnaval y hay que devolver la alegría después de lo que se ha pasado; segundo, hay que vivir con una cierta normalidad esta situación y por último, el Ayuntamiento contempla las medidas necesarias anticovid en la carpa donde se canta y asiste el público.

Sin embargo, Fran Montes prefiere no cantar en otros espacios donde puede estar el problema del contagio.

Hoy con Las Marchosas, incide que es la primera agrupación, desde 1987, formada solo por mujeres. Su primer pasodoble va dirigido al virus. “Le decimos lo que opinamos de él y lo que haríamos con él, pero también estará presente la gestión del Gobierno central, mientras que los cuplés se dedican a temas locales, el popurrí a temas regionales, concejales locales, famosos del corazón y una particular comparación del programa Salvamé con una murga de Santoña”.

Obviamente la covid-19 es un tema de actualidad, y tanto nosotras como las otras murgas hablamos de él, asegura Izara Incera, una joven de 22 años, natural de Santoña e integrante de Las Niñas, aunque también añade que tratarán temas de actualidad regionales como nacionales.

Desde Los Galipoteros, el santoñés Carlos Peña Valmaseda, de 28 años, adelanta que la letra es un secreto hasta que “la soltemos al pueblo el sábado, pero hemos decidido no tocar el tema de manera nostálgica, ya que todos hemos vivido día tras día situaciones trágicas que de alguna manera han censurado nuestra felicidad”.

Peña lleva desde los dos años y medio participando en murgas, 27 en total, tras iniciarse en la categoría infantil con Caloquillas y Coloreaducos, y pasar a los 15 años a la categoría adulta con Los Amigos de Chechu. Dos años después recaló en Los Galipoteros. En cuanto al resto de los párrafos, este murguista indica que los temas tratados son principalmente críticas a nivel local, regional y nacional, junto con muchos chistes que esperamos que sea del agrado del público.

Los Canallas también han decidido salir este año. Uno de sus integrantes,  Vindio Palacio Ansola, un santoñés de 34 años, adelanta que obviamente el tema está presente, pero sin pasarse. ”Ya son más de dos años de cepas, noticias, programas....entre otras, y creemos que no hay que seguir con lo mismo también a la hora de cantar. La gente está cansada. Es hora de disfrutar un poquito y sonreír”, revela.

Lleva desde el 2004 participando, 18 años, con El Local28, Los Trovadores, Frágile y ahora con Los Canallas, y avanza que en el resto de la letra sacan un poco la coctelera de todos los años: polémicas, noticias locales y nacionales, menciones especiales, se coge la actualidad y se sirve con un poco de ironía y sentido del humor. “Esperamos que haga pasar un buen rato a todos y todas”, expresó.

Hay otras murgas que se reservan los temas que tratan. Álvaro Rodríguez Alonso, natural de Santoña y de 30 años, lleva participando desde 2006 en adultos tanto en Los Minis, Los de Siempre, El Bunker y desde hace diez en los Artistas. “Solo puedo decir que intentaremos hacer pasar a la gente un buen rato, donde habrá letra reivindicativa y con humor, haciendo referencia a lo acontecido durante estos últimos dos años”, indicó.

Decisión

Ninguna de las murgas ha sufrido bajas este año debido al respeto o miedo que se puede tener al virus o por el hecho de estar contagiado. En algunos casos, han sido por motivos personales o laborales. A partir de ahí, los ensayos son una parte de la preparación de este concurso.

Para María Casas la pandemia ha sido un obstáculo a la hora de los ensayos, ya que si había algún positivo se debía parar durante unos días por precaución.  “A pesar de esto,  hemos podido seguir adelante y disfrutar de cada ensayo, con medidas”, puntualiza.

Por ese motivo, algo de miedo sí que ha habido al ensayar y poder subir a las tablas, ya que después de Navidad hubo una subida de casos y se convocó una reunión de agrupaciones donde se habló de la situación y de cómo se podría llevar a cabo el concurso con todas las medidas.

Por su parte, Alejandro Cordero considera que ha sido como un año cualquiera, salvo guardando las distancias. “Parecido a los demás años la verdad....con mucho cuidado, distancia y mascarilla. No tiene por qué pasar nada”, declara.

Desde su punto de vista “Sanidad permite realizar toda una serie de eventos y por lo tanto, por qué no las murgas”.

La afición y las ganas de Vindio Palacio le han llevado a estar presente otro año más. “No es solo el mes de cantar, son los ensayos, la elaboración, las letras...es estar prácticamente desde verano con la ilusión a flor de piel. Por esto, y sabiendo que la covid-19 está aquí para largo y que hay que convivir con ello, lo mismo que participando o realizando otras aficiones, pues no nos queríamos quedar en casa. Eso sí, cumpliendo siempre todas las normas y medidas vigentes”, advierte.

Este murguista de Los Canallas valora que gracias al Ayuntamiento han podido ensayar en un local amplio y ventilado, y en las últimas semanas en las gradas del campo de fútbol del Paloma. “Se ha pasado frío y han sido un poco sufridos porque hemos mantenido las mascarillas puestas hasta hace poco y cantar así no era cómodo. Pero es lo que se tenía que hacer y gracias a eso, la separación y un poquito de suerte, no hemos tenido ningún parón por tener varios componentes con covid. Ha habido casos aislados, pero por el ámbito social y familiar de cada uno”, específica.

Además, quiere ofrecer más explicaciones. A su entender si surge una polémica será porque algunos la buscarán y ondearán la bandera del “ya os lo dije”. En su opinión “todos los deportes, actuaciones, conciertos, teatros, cines....están en funcionamiento. Si ocurre algún caso, se actúa como dicta la normativa vigente, y a seguir. Que la única polémica en las últimas semanas sea que las murgas esto y las murgas lo otro cuando el resto del mundo avanza, es porque algunos han querido que sea así” asegura.

Y no solo esto, este murguista añade que por su parte miedo ninguno, respeto el de siempre, y sobre todo ganas de hacerlo bien cumpliendo a rajatabla las medidas que el Ayuntamiento crea oportunas.

Desde Los Artistas lo tienen claro. Este año las ganas les han llevado a preparar la murga, conocedores de que en cualquier momento podría llegar la noticia de que se suspendía, “pero por suerte la situación ha ido a mejor, lo que nos va a permitir cantar lo que hemos preparado para el pueblo”.

No ocultan que los ensayos han sido raros e incómodos con mascarillas y distancias de seguridad. Además, este año más que nunca han ensayado con audios del móvil, ya que del día 22 de diciembre al 10 de enero han parado para no poner en peligro a sus familias en Navidad. A pesar de todo el cuidado del mundo, muchos integrantes han pasado el covid y han perdido muchos ensayos. Pero al final, Los Artistas han llegado a la última semana con los deberes hechos. “Cierto es que un par de semanas nos vendrían de lujo, pero eso nos pasa todos los años jajaja”, señalan entre risas.

La única polémica que aparece es si se tiene que organizar el concurso o no, y en ese sentido esta agrupación lo tiene claro, eso lo decide el Ayuntamiento siguiendo las pautas según la situación actual de la pandemia. “En las mismas fechas en Santander hay un concierto en el Palacio de Deportes con 8.000 entradas vendidas, no hay más que decir”, analizan cuando se les pregunta sobre la decisión de salir a cantar.

Ensayos

Este año debido a la covid-19, ha supuesto para Álvaro Rodríguez que los grupos que han dudado, al final no les ha dado tiempo a completar las murgas y el número de participantes ha sido pequeño, “pero espero que el año que viene se coja todo con más fuerzas”.

Como integrante de Los Galipoteros, Carlos Peña se toma las murgas como algo más que un hobby. “Las he mamado desde que estaba en la tripa de mi madre y he crecido entre ensayos de Calocas, Galipoteros y Caloquillas. Dicen que los de Santoña estamos enfermos con el Carnaval, y en mi caso la verdad es que es así”, afirma.

No duda en contar que actualmente disfruta del Carnaval junto a un grupo de amigos que es una familia, y eso le lleva a tener más ganas que nunca por salir.

Evidentemente, están los ensayos, distintos a los de otros años debido a la situación actual, lo que ha supuesto no ensayar en la peña al ser un espacio reducido para todos. Como solución, han buscado un local más amplio y ventilado para estar más seguros. “Hemos pasado bastante frío, pero estoy seguro de que va a merecer la pena”, declara con rotundidad.

Para finalizar, siempre está presente el miedo o el respeto. “Miedo no hay, ya que creemos que estamos intentando trabajar de manera segura. Pero, siempre queda la duda de qué pasará si a mitad de concurso alguno se contagia en cualquier ámbito. Sería una situación complicada de resolver, pero seguro que encontraríamos la manera de sacarla adelante”, comenta.

Por su parte, Las Niñas es una murga formada por 18 integrantes, entre quienes cantan y tocan los instrumentos. Izara Incera forma parte de ellas y manifiesta que participa en las murgas “porque yo, al igual que la mayoría de mis compañeras llevamos saliendo en murgas desde pequeñas. Este año respetamos todas las medidas que sanidad que imponga, creo que podemos empezar a hacer vida normal y el concurso de murgas es, sin duda, el evento de Carnaval más controlado”.

Cuando reflexiona sobra su presencia este año sobre el escenario, reitera que el Ayuntamiento ha organizado el concurso siguiendo las medidas sanitarias y al igual que se pueden hacer otros acontecimientos, este se rige por las medidas de Sanidad.

Para esta agrupación los ensayos han sido un poco caos, puesto que han tenido que hacerlo con mascarilla y era bastante incómodo.

Las Marchosas, una murga donde sus componentes trabajan también su escenografía en lugar de encargarla, explica que los ensayos se han desarrollado de forma normal hasta el día 21 de diciembre que, por petición del Ayuntamiento y debido a la subida de casos y nueva cepa, se paró dos semanas y ellos decidieron hacerlo tres.

Son 11 y todos pasaron la covid-19, menos uno durante el tiempo de descanso. Decidieron reanudar la actividad el día 18 de enero, circunstancia por las que saldrán ante el público casi sin ensayos, pero con muchas ganas. “No hay bajas y se han incorporado nuevas como es el caso de una niña de 13 años que no puede cantar debido a su edad y participará como figurante”, aclaran.

Fran Montes no se esconde a la hora de decir que no tiene miedo porque es el acto más seguro del Carnaval, “otra cosa es que se contagie la gente en la calle y les echen la culpa a los murguistas”.

Y este año han decidido un final atípico más allá de la típica despedida. Unas líneas estarán dedicadas a homenajear a una persona que falleció de Santoña, muy especial, querida y no vinculada al Carnaval.