domingo. 08.09.2024
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Vecinos de una comunidad alertan sobre la ‘estafa del ascensor’

Municipios como Castro Urdiales, Laredo, Santoña, Noja, Colindres, Reinosa, Bareyo y Santander sufren que no se comiencen o acaben las obras de su instalación y el responsable de la empresa no les atienda

Una comunidad de vecinos de Castro Urdiales han iniciado la denuncia de esta situación.
Una comunidad de vecinos de Castro Urdiales han iniciado la denuncia de esta situación.
Vecinos de una comunidad alertan sobre la ‘estafa del ascensor’

Vecinos de 16 comunidades de diversos municipios Cantabria están implicados, hasta el momento, por la ‘estafa del ascensor’ que vienen sufriendo desde hace tiempo, tras intentar, sobre todo, entre los años 2023 y 2024, la instalación de un ascensor en sus bloques de viviendas.

Municipios como Castro Urdiales, Laredo, Santoña, Noja, Colindres, Reinosa, Bareyo y Santander sufren que no se comiencen o acaben las obras y el responsable de la empresa Grandastur 2007, cuyo gerente es José Luis Alonso Granda, no les atiende. Así lo aseguró José Manuel Marta, uno de los vecinos implicados en la calle Arturo Dúo, número dos, en Castro Urdiales.

En su caso, los hechos se remontan al año 2022 cuando los vecinos deciden colocar un ascensor y tras contactar con la empresa OTIS les remiten a Grandastur 2007.

Comenzaron en enero de 2024 durante 15 días seguidos, desaparecen y regresan en el mes de abril unos días. Ante las quejas, Grandastur envió a un encargado de obra que prometió finalizar los trabajos, pero a día de hoy no están concluidos”, comentó José Manuel Marta.

Dada la situación y ante los intentos de contactar con Grandastur por parte del administrador de la comunidad, el resultado, según los implicados, es que no les atiende, no contesta a las llamadas telefónicas ni a los correos electrónicos.

En otra de las comunidades de vecinos, explico el portavoz, la obra no está acabada y los andamios colocados han sido retirados debido a que no se pagaban. Ante esta situación, con los perjuicios que ocasiona, sobre todo a personas mayores y discapacitadas, y el riesgo que corre toda la comunidad, José Manuel Marta ha puesto el asunto en manos de un abogado.

Situación de las obras en una comunidad.
Situación de las obras en una comunidad.

El objetivo, en el caso de que no se resuelva la situación, es acudir a la Justicia con el fin de que se acaben las obras. “No queremos dinero ni contratar otra empresa”, matizó.

En esa denuncia en los juzgados y ante la posibilidad de que Grandastur se declaré insolvente, exigirán responsabilidad civil subsidiaria a OTIS. “En mi caso, ha supuesto un coste de 95.000 euros entre el ascensor y la obra civil, tras el presupuesto presentado por Grandastur y en otros más de 120.000 euros como en la calle Juan Echevarría, número 17, en Castro Urdiales”, manifestó José Manuel Marta.

Hay diferentes casos entre las comunidades, ya que algunas han pagado al completo la obra y otras el 20 por ciento y ni siquiera han iniciado los trabajos. “Además, hay comunidades donde han instalado el ascensor y como Grandastur no ha pagado a OTIS, sigue sin funcionar”, explicó el afectado de Castro Urdiales.

E incluso, José Manuel Marta apunta casos en que “Grandastur ha subcontratado a autónomos para la obra civil, les pidió fianza y les ha dejado a deber la obra. Fueron a jucio y no se presentó el gerente”.

Loa afectados de la calle Arturo Dúo, número dos, inciden en que han contratado un abogado, pero remarcan que otros implicados pueden sumarse a su futura demanda.

Perfil en Facebook

Tras la situación que vive, José Manuel Marta abrió un perfil en Facebook para explicar el problema. Como fruto de esta iniciativa, 16 comunidades vecinales han contactado con esta persona al sufrir la misma  situación, aunque reseña que podrían existir otros implicados. “De hecho, en Avilés, en Asturias, hay dos comunidades más”, adelanta.

El periódico ha intentado contactar con Grandastur, tanto en su número de teléfono que viene en su web, como por correo electrónico y por su propia página digital, y no ha recibido respuesta, hasta el punto de que el número sale como no existente.

También, se ha puesto en contacto con la compañía OTIS, por correo electrónico, sin obtener contestación.