Sanidad difunde el protocolo de detección precoz de la viruela del mono
El objetivo de la Consejería y el Servicio Cántabro de Salud es garantizar la detección y diagnóstico precoz de cualquier posible caso y evitar cadenas de transmisión
La Consejería de Sanidad y el Servicio Cántabro de Salud (SCS) han difundido el protocolo para la detección precoz y manejo de casos ante la alerta de viruela del mono en España, adaptado a Cantabria.
El objetivo es garantizar la detección y el diagnóstico precoz de cualquier posible caso de esta enfermedad para adoptar de manera inmediata las medidas de control adecuadas que eviten la aparición de casos secundarios. La detección de nuevos casos es fundamental para cortar posibles cadenas de transmisión.
El protocolo se ha trasladado a las gerencias del SCS, para que los profesionales del servicio de salud conozcan la información para la detección y cómo actuar ante sospecha de algún caso.
La viruela del mono es una enfermedad zoonótica poco frecuente. El 15 de mayo, Reino Unido notificó una agrupación de cuatro casos confirmados. Tres días después, el 18 de mayo, Portugal comunicó cinco casos confirmados y alrededor de veinte sospechosos. Y en Madrid se han confirmado siete casos y hay una veintena más en estudio.
Sintomatología leve
Los casos que se han identificado hasta el momento son leves. El cuadro clínico inicial suele incluir fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares, linfadenopatías y cansancio. Entre uno y cinco días después de la aparición de la fiebre se desarrolla una erupción, que a menudo aparece en la cara y después se extiende a otras partes del cuerpo.
Los síntomas suelen durar entre dos a cuatro semanas, y los casos graves se dan con mayor frecuencia entre niños, adultos jóvenes y personas inmunocomprometidas. Están relacionados con el grado de exposición al virus y la vulnerabilidad de la persona.
De momento, en Cantabria no hay sospecha de ningún afectado, pero todas las gerencias están advertidas, tras lanzarse una alerta por enfermedad infecciosa, de declaración obligatoria, a nivel mundial.