El Pleno de Santander aprobó pedir la instalación de un ascensor en el apeadero de Nueva Montaña
También se dio el visto a la moción de los Grupos municipales del PSOE y PRC para acometer mejoras en la zona de San Román de la Llanilla
El Pleno del Ayuntamiento de Santander aprobó solicitar la instalación de un ascensor en el apeadero de Nueva Montaña a la Administración de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) y remitir el acuerdo a la Delegación de Gobierno en Cantabria.
La iniciativa, presentada por los Grupos municipales del PP, PRC, Cs y Mixto, se acordó por unanimidad, a pesar de que el PSOE registró una enmienda transaccional que no fue admitida.
El portavoz Daniel Fernández pidió que el Consistorio se comprometa a firmar con convenio con ADIF para colocar el ascensor, ceder el terreno y encargarse de su mantenimiento.
El concejal César Díaz (PP), indicó que no hay ningún problema, salvo que el Ayuntamiento no puede correr con el mantenimiento, dado que no es municipal, una aclaración en la que también coincidieron Vox y Unidas por Santander al entender que la infraestructura pertenece a ADIF.
Por su parte, el concejal de Cs, Javier Ceruti, señaló que ADIF ha perdido el respeto a Santander, ya que en esta ciudad pretende compartir gastos y en otras corre con toda la inversión, además del proyecto que pretende acometer en la calle Castilla, mientras que el PSOE defendió las inversiones realizadas en Santander por este organismo.
Transporte
En otro punto en el orden del día y salvo con la abstención de Vox, se dio el visto bueno a la moción de socialistas y regionalistas para ejecutar mejoras en la zona de San Román de La Llanilla.
El edil Francisco Javier González defendió que debido al incremento de la población se debe aumentar la frecuencia de la línea 17 del autobús y las nocturnas, revisar las marquesinas, las aceras, el mobiliario, los caminos y mejorar los semáforos, así como eliminar la falta de visibilidad para el tráfico.
Mientras que Vox señaló que prefiere escuchar a los diferentes departamentos, dado que afecta a varios asuntos, Unidas por Santander lo consideró oportuno. Por su parte, el PRC remarcó que se deben atender las zonas periféricas, ya que es una deuda histórica.
Desde el PP indicaron que mantienen contactos con los vecinos y recordó que se han realizado mejoras en la movilidad con tres pasos de peatones, se han ampliado y construido nuevas aceras, mejorado la seguridad vial en el entorno del colegio Verdemar, así como las instalaciones deportivas. “Y además tendrá un nuevo campo de fútbol y actuaciones dentro del Plan de Sostenibilidad Turística, junto con una glorieta en la calle Corceño”, explicó.
En cuanto al transporte, se han estudiado alternativas y una de las conclusiones es que el 77 por ciento de la población vive a menos de 300 metros de una marquesina, mientras que el resto por la ubicación de su vivienda es difícil mejorar su cercanía. “Aun así, comentó, se licitará la compra de nuevas marquesinas por un coste de 200.000 euros y se estudiará su distribución.