“El derribo me ha pillado en Mallorca, pero los 25 años sufridos han sido un horror", comentó María Ángeles Santiago, propietaria en Cerrias dos

A María Ángeles Santiago, propietaria de una vivienda en la urbanización Cerrias dos, el derribo de las cinco casas le pilló en Mallorca donde pasa unos días con su familia para desconectar de los problemas personales, entre los que se incluye la demolición.

Esta vecina, natural de Cartes, que residió en el País Vasco y a su regreso a Cantabria compró su vivienda de 160 metros cuadrados, con cuatro habitaciones y tres aseos en un terreno de 650 metros cuadrados, desconocía que hoy se llevaría a cabo la demolición debido a la sentencia firme del Tribunal Supremo.

La propiedad de esta mujer que entró a vivir en el año 2000 con 44 años y ahora tiene 68, forma parte de las urbanizaciones Cerrias uno y dos, junto a más de 50 afectados. De hecho, ha residido con sus padres y en la actualidad lo hace con su hija pequeña que hoy acudió al médico. En la conversación telefónica que mantuvieron hoy no ha surgido ningún comentario sobre la situación vivida en Liencres, en Piélagos, ya que tampoco conocía que hoy se ejecutará el derribo y las viviendas estas ubicadas en otra calle.

En su caso, espera que con la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana de piélagos se pueda regularizar su casa, ya que se encuentra a 300 metros de la playa y no le afecta la Ley de Costas, como a otras.

Aun así, María Ángeles Santiago asegura que la experiencia de estos 25 años ha sido un horror. “Desde la época de Jesús Ángel Pacheco como alcalde se estaba redactando un PGOU que iba a dar solución a las demoliciones”, aseguró.

La pala

Y precisamente, la pala entró hoy a derribar cinco viviendas tapiadas, de propietarios que prefirieron la indemnización y entregaron las llaves, con el fin de que no sean ocupadas, como ha sucedido en Argoños.

Esta mañana se ha iniciado el derribo de cinco de las siete viviendas de la urbanización Calas del Norte de Cerrias dos, en Piélagos, cuyos propietarios han llegado a un acuerdo con el Gobierno de Cantabria, por medio de Gesvican, y han sido indemnizados.

De esta forma, el Gobierno de Cantabria y el Ayuntamiento de Piélagos ejecutan las primeras sentencias de derribo que pesan sobre un total de 22 viviendas en Cerrias dos, 17 en Cerrias uno, otras 20 en Entrelindes, y 21 viviendas en el área L05.

El consejero de Fomento, Ordenación del Territorio y Urbanismo, Roberto Media (PP), y el alcalde, Carlos Caramés (PP), que han acudido a Cerrias dos esta mañana, han mostrado su empatía con los propietarios de las viviendas, en un día “triste para toda Cantabria”, dado que, como ha dicho el consejero, “hace mucho tiempo que se debiera haber llegado a una solución que permitiera salvar las viviendas de vecinos que no tuvieron ninguna culpa”.

Roberto Media ha explicado que se sigue trabajando con todos los vecinos para cumplir los convenios que permitan compensar económicamente por el derribo de sus viviendas con el objetivo de que “a lo largo de la legislatura”, tanto en Piélagos como en todos los municipios afectados, se consiga “una solución definitiva”. “No se puede eternizar el dolor y los perjuicios a los vecinos”, ha dicho el consejero y, por ello, ha insistido en que es “el momento de finalizar esta situación”.

El titular de Urbanismo ha apuntado a que, como responsables políticos, “no queda más remedio que cumplir las sentencias judiciales”, si bien ha lamentado el sinsentido de que, “casas mucho más cercanas a la costa vayan a seguir ahí porque no tienen ningún problema legal”.

En el mismo sentido se ha expresado Carlos Caramés, quien ha afirmado que se acatan las sentencias judiciales al tiempo que ha expresado su “sensibilidad” con las familias de su municipio que llevan “más de 20 ó 25 años sufriendo y padeciendo la espada de Damocles de los derribos de sus casas”.

Caramés ha explicado que el Ayuntamiento trabaja en solucionar el mayor número de viviendas posibles por medio del Plan General de Ordenación Urbana y otras herramientas legales.

También el alcalde ha expresado la necesidad de trabajar para que “no vuelvan a suceder estas cosas en el futuro”.

El alcalde de Piélagos ha recalcado que estas viviendas no contravienen ninguna Ley de Costas. En este sentido, ha recordado que hubo una demanda de la Asociación ecologista ARCA que decía que este suelo no cumplía los requisitos para ser urbano, independientemente de que esté cerca o lejos de la costa, hay viviendas más próximas que son legales, ya que, según demandaron, no tenía servicios como agua, saneamiento o infraestructuras viarias.

“Se consideró que no cumplía los requisitos para considerarse suelo urbano y se anularon las licencias”, ha rememorado el regidor municipal.

Caramés ha puntualizado que dichas licencias fueron concedidas en base a la calificación de suelo urbano que le había dado el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del Ayuntamiento de Piélagos aprobado en 1993 por todos los grupos políticos que integraban entonces la Corporación municipal (UPCA, PSOE y PP) y por el Gobierno de Cantabria, con el visto bueno del PRC que entonces presidía la Comisión Regional de Urbanismo (la actual Crotu).

“Lo aprobaron los técnicos y políticos de ambas administraciones tanto en la aprobación del PGOU como en la tramitación de licencias, pero tras la denuncia de ARCA a la licencia lo anuló el Juzgado después”, ha apostillado.

Caramés ha aclarado que la urbanización no tiene sentencia de demolición sino sólo las viviendas por lo que las aceras se van a quedar, al igual que el resto de servicios. De hecho, ha explicado que en esta urbanización hay una depuradora que da servicio de saneamiento al resto de la zona de Liencres.

“Tenemos en el centro del pueblo otras viviendas (L05), chalets junto a la Plaza de Adolfo Suárez, con sentencia de derribo por la misma razón y en las que, si se tirasen, en un futuro, se podrían construir pisos”, ha comentado el alcalde, quien ha incidido en que “aquí -en alusión a “Calas del Norte” en la Urbanización Cerrias II- se anularon las licencias porque se consideró por el Juzgado que el suelo no cumplía los requisitos para ser urbano”.

Responsabilidad de todos

Caramés ha aseverado que es “responsabilidad de todos y no de un grupo concreto”. “Aunque en Piélagos gobernaba UPCA y PSOE cundo se dieron las licencias y el PRC era el responsable de Urbanismo en el Gobierno de Cantabria, en base a que las licencias se concedieron según la categoría de suelo urbano que establecía el PGOU de 1993 aprobado por todos los grupos, incluido el PP, con el visto bueno de los técnicos municipales y regionales, todos tenemos que trabajar para que, en un futuro, este tipo de cosas no vuelvan a suceder”, ha argumentado

En la misma línea ha reiterado que desde el Ayuntamiento de Piélagos se va a tratar de de solucionar el mayor número de viviendas con sentencia de derribo, tanto por la vía del nuevo Plan General como de otro tipo de herramientas legales.

“En este caso, no ha sido posible encontrar otra solución que no sea el derribo y tal y como nos exige la Justicia no nos queda otra”, ha subrayado.

El alcalde de Piélagos ha comentado que, han sido cinco de las siete viviendas de la Urbanización Calas del Norte, las que han sido entregadas por parte de sus propietarios a Gesvican

Asimismo, ha comentado que el propietario de la sexta vivienda tiene la voluntad de entregarla este mismo mes.
“Los únicos que no tienen la culpa de nada y que son inocentes son los propietarios, que llevan muchos años sufriendo esta situación injustamente”, ha concluido.