La hostelería cántabra tendrá un protocolo para actuar ante situaciones de acoso o agresiones sexuales
Señalética, formación homologada y un espacio seguro para la víctima, son algunas de las medidas que recoge el protocolo
La Asociación de Hostelería de Cantabria ha participado en la puesta en marcha de un protocolo que sirva de guía sobre cómo actuar ante situaciones de acoso o agresión sexual entre clientes.
Este protocolo, que ha sido consensuado, durante un encuentro en Palencia entre Hostelería de España y representantes de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, contiene, tanto medidas aplicables desde el establecimiento hostelero de manera proactiva, como información para los clientes o medidas complementarias. Para compartir propuestas y dar a conocer su contenido, se han solicitado reuniones con los Ministerios de Igualdad, Interior y Turismo.
En primer lugar, el objetivo es que los locales se adhieran a este protocolo como “Local activo ante posibles situaciones de acoso o agresión sexual entre clientes”. Para ello tendrán que disponer de información y señalética visible para los clientes en la que se muestre claramente las instrucciones a seguir ante una posible situación de acoso o agresión sexual.
Otra de las medidas que debe tomar el establecimiento es disponer de un espacio seguro en el que poder invitar a permanecer a la víctima de acoso o agresión sexual hasta que las autoridades y asistencias puedan atenderla adecuadamente.
Para poder poner en marcha este protocolo es imprescindible que la dirección y trabajadores del establecimiento realicen un proceso de formación homologada, con una especial dedicación del departamento de seguridad y control de acceso.
La información visible para los clientes debe explicar el modo de proceder y los pasos a seguir si se encuentran en una situación de acoso, o han sido víctima de una agresión sexual por otro cliente dentro del establecimiento. Deberá dirigirse a cualquiera de los trabajadores del establecimiento y darles a conocer la situación, utilizando una de las siguientes palabras: acoso o agresión y la palabra ayuda, para que el personal se ponga a su disposición y se active el Protocolo.
El personal deberá atender a la posible víctima, haciendo que la situación sea lo más discreta y cómoda posible. La trasladará a un espacio tranquilo, previamente determinado, en el que podrá esperar de manera segura la llegada de los servicios de policía y atención especializados. De manera simultánea los empleados del establecimiento avisarán a la policía y/o servicios especializados para que la víctima sea atendida por ellos a la mayor brevedad, independientemente de que lo hubiera hecho también la propia víctima o alguno de sus acompañantes o testigos del acoso o agresión.
Para el presidente de la Asociación Empresarial de Hostelería de Cantabria, Javier Bedia, se trata de dotar a los establecimientos y a los empresarios de una herramienta para que sepan cómo actuar ante una situación de este tipo y poder proteger a la víctima de la forma más inmediata.
Algunas de las medidas complementarias que pueden implementar los establecimientos hosteleros, son asegurar la disponibilidad de grabaciones de cámaras de vigilancia ante posibles posteriores investigaciones por parte de policía o intervención judicial; la formación específica para el personal de seguridad y de control de accesos para posibles actuaciones ante la persona que presuntamente haya realizado el acoso o la agresión. Además, se recomienda, en la medida de lo posible, intentar que los elementos que hayan podido intervenir en lo ocurrido no se alteren.
Además, Hostelería de España proporcionará con carácter gratuito a sus asociados el documento de declaración responsable, un distintivo de adhesión al protocolo y la señalética necesaria, las sesiones formativas para el personal y la dirección el establecimiento y también un asesoramiento jurídico concertado con el despacho Cremades y Calvo Sotelo para el estudio de cada situación y posible actuación como acusación particular.
En cuanto a las situaciones de acoso o agresión por razón de género u orientación sexual, con motivación sexual en el ámbito de las relaciones laborales existe ya un protocolo en el marco del sexto Acuerdo Laboral De Hostelería-ALEH. El curso incluye un temario enfocado a evitar casos de acosos sexual en el entorno laboral, dirigido a gerentes.