sábado. 23.11.2024
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Música y literatura se unen con Schönberg-Kafka, con Bach de fondo en el Palacio de Festivales

También acogerá el 14 Festival Internacional de la Magia y lo Audiovisual

Palacio Chouchane-Siranossian-05_by -Nikolaj-Lund
La violinista Chouchane-Siranossian.
Música y literatura se unen con Schönberg-Kafka, con Bach de fondo en el Palacio de Festivales

Música y literatura se unen con Schönberg-Kafka, con Bach de fondo en el Palacio de Festivales el miércoles, día 23 de octubre, a las 19.30 horas y en la Sala Pereda.

Un espectáculo de 65 minutos, sin descanso, para conmemorar en 2024 dos fechas trascendentes de la gran cultura universal: 150 años del nacimiento de Arnold Schönberg (1874-1951) y el centenario de la muerte de Franz Kafka (1883-1924).

Dos creadores de la máxima influencia en el devenir del arte posterior. Schönberg, a través de sus ideas, escritos teóricos, algunas de sus obras (Pierrot, etc.) y también de sus alumnos (Escuela de Viena, Berg y, sobre todo, Webern).

Y Kafka, de no pocos títulos que forman parte indiscutible del canon de la literatura del siglo XX: ‘La metamorfosis’ (1915), ‘El proceso’ (1915). Siguen hoy siendo fuente inagotable de influencia en el arte, no solo la literatura, actual.

Así el público disfrutará de Chouchane Siranossian, violín; Astrig Siranossian, cello; Nathanaël Gouin, piano; Alberto Iglesias, lecturas, y Esteban Sanz, dirección artística.

El programa incluye J. S. Bach (1685-1750) Fantasía en Do menor, BWV 906 (piano), A. Schöenberg (1874-1951) Fantasía para violín y piano, op. 47, J. S. Bach (1685-1750) Sonata para violín y piano BWV 1023, A. Schöenberg (1874-1951) Noche transfigurada (versión para trio), y A. Schöenberg (1874-1951) Giga de la Suite op. 25 (1921-23). El programa se completa con lecturas de breves relatos de Kafka.

De igual forma, tendrá lugar el 14 Festival Internacional de la Magia y lo Audiovisual con la Gala ‘Los mejores magos del mundo’ el sábado, día 26 de octubre, a las 19.30, y el domingo, día 27 de octubre, a las 18.00, en la Sala Argenta.

Con una duración de 100 minutos, sin descanso y bajo la dirección de Raúl Alegría se crea este espectáculo único, en el que selecciona a algunos de los mejores ilusionistas, campeones mundiales y artistas visuales del mundo, por su magia, por su originalidad y por su puesta en escena, para reunirlos en un mismo espectáculo.

Esta gala sorprende por su magia inédita, nunca antes vista en Cantabria; pero también por una puesta en escena diferente fusionando el ilusionismo con el teatro y muchas otras artes.

La programación e complementa con Conservaciones: lectura poética el martes, día 22 de octubre, a las 19.30 horas y en la Sala María Blanchard, a cargo de Lola Tórtola.

Con una duración 60 minutos, sin descanso, una joven poeta también médico. Un viaje (de estudios) a través de Europa. De esa experiencia surge un libro intenso y profundo.

Un poemario que termina por dar título (prestado) a nuestro universo, ese en el que conviven Arnold Schönberg y Franz Kafka. Tres sensibilidades que resuenan por encima del siglo que las separa.

Lola Tórtola (1997), autora de ‘Dioses destruidos’, es una poeta que se destaca por su estilo particular y la profundidad de su obra.

Los poemas de su, por el momento, única obra, salvadas todas las distancias, transmiten, exploran, hablan de algún modo de cosas no demasiado alejadas de lo que expresaban o exploraban entre otros muchos Arnold Schönberg y Franz Kafka en los inicios del siglo XX.

Tórtola aborda en su obra cuestiones relacionadas con la identidad, el ser y la existencia. Su poesía es un viaje introspectivo que examina el yo desde múltiples perspectivas.

En ‘Dioses destruidos’ se puede percibir una crítica hacia las estructuras de poder y la religión. Su título ya sugiere una deconstrucción de las figuras que tradicionalmente han sido veneradas, poniendo en duda su relevancia en el mundo contemporáneo.

Mediante un lenguaje cargado de simbolismo y metáforas, su poesía profunda, densa, contiene imágenes poderosas, también evocadoras, que invitan a una lectura reflexiva.

La poeta explora el concepto de destrucción como un preludio al renacimiento. Los dioses destruidos pueden representar tanto la caída de viejas creencias como la posibilidad de reconstrucción desde las ruinas, un tema, por otra parte, recurrente en la poesía moderna.