El juicio contra dos acusados de realizar carreras por Santander, colisionar con una motocicleta y fallecer un joven comenzará el lunes
El recorrido comprendió desde la calle Antonio López hasta Puertochico, pasando por el túnel de Botín y el Paseo Pereda
El juicio contra dos acusados de realizar carreras por Santander, colisionar con una motocicleta y fallecer un joven comenzará el lunes, día 6 de mayo, a las 9.30 horas Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Cantabria.
El lunes tendrá lugar la constitución del jurado y los informes previos. El interrogatorio de acusados será el martes, día 7 de mayo, a las 9.40 horas.
Los hechos se remontan al momento en que los dos acusados de circular a gran velocidad por las calles de Santander, realizando una carrera que concluyó con la colisión de uno de ellos con una motocicleta que circulaba, provocó, presuntamente, el fallecimiento de un joven en el acto.
Según el escrito de la Fiscalía, uno de ellos se encontraba parado en un semáforo y al ver que el otro venía desde atrás a fuerte velocidad, el primero “acelera bruscamente, generándose inmediatamente un concierto tácito de ‘pique’ o carrera”.
Ambos mantienen la carrera desde la calle Antonio López hasta Puertochico, pasando por el túnel de Botín y el Paseo Pereda, circulando “a una velocidad media bastante superior a los cien kilómetros por hora”.
El escrito del ministerio fiscal detalla velocidades en los distintos tramos del túnel de Botín de 123,43 kilómetros por hora, 128,54 o 124,65, donde la velocidad está limitada a 40.
Luego, en el Paseo Pereda “parece que disminuyen algo la velocidad, pero siempre por encima de los 50 kilómetros por hora permitidos, conduciendo de manera temeraria” y realizando adelantamientos por el carril bus.
Ya en la rotonda de Puertochico obligan a un vehículo a “frenar hasta casi parar para evitar la colisión” con los dos coches de los acusados, quienes “conducían despreciando manifiestamente la vida de los demás”.
Al salir de la rotonda “continúan circulando a muy alta velocidad”, el primero por el carril izquierdo a 136,85 kilómetros por hora y el otro, por el derecho, a 114.
Pierde control
En esa situación, el primero, “despreciando totalmente la vida de los demás usuarios de la vía, continuó la marcha a una velocidad elevada, y cuando pierde el control de su vehículo se sale de la vía por la izquierda, subiéndose a la mediana con altura de acera, invadiendo el carril izquierdo contrario”.
Por ese carril contrario circula correctamente un joven conduciendo un ciclomotor, contra el que cocha de manera frontal y angular, desplazando al ocupante de la moto unos ocho metros y al ciclomotor casi 43 metros.
El vehículo continuó por el carril contrario, rebasó de nuevo la mediana y se detuvo finalmente ya en su carril a más de 60 metros del lugar del impacto.
El joven murió y los dos conductores fueron sometidos a análisis que arrojaron positivo en consumo de drogas.
La Fiscalía califica los hechos como un delito de homicidio y delitos contra la seguridad vial en la modalidad de conducción temeraria con manifiesto desprecio por la vida, conduciendo a velocidad superior en sesenta kilómetros por hora en vía urbana y bajo la influencia de las drogas.
Al conductor que impactó con el joven, el Ministerio Público le considera autor del citado delito de homicidio en concurso con los mencionados delitos contra la seguridad vial, con la concurrencia de la circunstancia agravante de reincidencia, ya que ha sido condenado en otras ocasiones por delitos de tráfico.
Pena
Por ello, la pena que solicita asciende a 14 años de prisión y a 10 años de privación del derecho a conducir vehículos a motor. En concepto de responsabilidad civil, considera el Ministerio Fiscal que debe indemnizar a la familia del fallecido en 301.400 euros.
Por otro lado, la Fiscalía entiende que el otro conductor es autor de un delito de conducción temeraria con manifiesto desprecio por la vida en concurso con otros dos delitos contra la seguridad vial por conducir a velocidad superior en sesenta kilómetros hora por vía urbana y bajo la influencia de las drogas. La pena solicitada asciende a cuatro años de prisión y 10 años de privación del derecho a conducir vehículos a motor.
Por su parte, la acusación particular que ejerce la familia del fallecido, considera que ambos conductores son autores del delito de homicidio en concurso con el delito de conducción con manifiesto deprecio a la vida de los demás.
Para el que colisionó con el ciclomotor, solicita una pena de 13 años y ocho meses de prisión, así como 3.240 euros de multa y ocho años de privación del derecho a conducir, al considerar que concurre en él la agravante de reincidencia.
Para el otro conductor, la acusación particular pide una pena de 12 años y cinco meses de prisión, así como la misma multa y el mismo periodo de privación del derecho a conducir. En concepto de responsabilidad civil, solicita que ambos indemnicen a la familia en 343.000 euros.
El juicio continuará los días 7, 8, 9 y 10 de mayo, en sesiones que empezarán a las 9.40 horas. El día 13 de mayo será la entrega del objeto del veredicto al jurado.