Salvado un joven encaramado al marco de la ventana de un octavo piso de Cazoña en Santander
El trabajo en equipo y la rapidez de la actuación de la Policía nacional hizo posible el éxito de esta intervención
El trabajo en equipo y la rápida actuación de los agentes de la Policía Nacional ha hecho posible culminar con éxito un servicio humanitario al evitar la caída de un joven de 24 años de edad que se encontraba sentado en el alféizar de una ventana, sujeto solamente con una de sus manos. Los hechos tuvieron lugar en el octavo piso de un edificio ubicado en la zona de Cazoña en Santander.
La pasada noche del sábado, día 25 de agosto, se recibió una llamada en el Centro Inteligente de Mando Comunicación y Control (Cimacc-091), donde un hombre alertó que su compañero de piso no se sentía muy bien y que el mismo se encontraba sentado en el exterior de la ventana de un octavo piso, pudiendo correr peligro su vida.
Inmediatamente, agentes del Grupo de Atención al Ciudadano (GAC) de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana se personaron en el lugar.
Una vez en el domicilio, pudieron observar a un joven con la respiración muy agitada, que se encontraba sentado en el exterior de una ventana, agarrándose únicamente con una de sus manos al cristal de la misma.
Los agentes intentaron conversar con el joven, siendo imposible en estos primeros momentos, ya que éste no atendía a sus requerimientos. El joven se encontraba sollozando e incluso parecía que presentaba signos de adormecimiento, los cuales, preocupaban a los agentes ya que podrían hacer peligrar su vida con el balanceo de su propio cuerpo.
Finalmente, y tras varios intentos ya que el joven no permitía que los agentes se le acercaran, uno de los policías consiguió entablar una conversación con la víctima, interesándose por su estado, y con la suficiente empatía como para intentar poder ganarse su confianza y tratar de igual modo que el joven se retirara de la ventana, ante el riesgo de una caída y posible fatal desenlace.
Dos piernas
Los minutos iban pasando y el agente intentó mantener la conversación con el joven, ya que no dejaba que los policías se le acercaran, y además, parecía presentar síntomas de ir perdiendo la consciencia por momentos, hasta que en un momento dado, pudieron observar como la víctima se queda totalmente en equilibrio con sus dos piernas colgando y únicamente asido con el brazo al marco de la ventana.
En ese momento en el que dos agentes proceden a agarrar fuertemente a la víctima justo antes de caer al vacío, a la vez que un tercer agente sujetó a los mismos tirando de ellos fuertemente hacia atrás, logrando introducir al joven en la habitación y conseguir ponerle a salvo, resultando lesionado en el transcurso de esta maniobra el tercer agente.
Gracias a esta acción policial no exenta de riesgo para los agentes, y donde uno de ellos resultó lesionado, se ha conseguido auxiliar a esta persona en situación de riesgo, siendo atendida por los servicios sanitarios que también se desplazaron al lugar y trasladada al Hospital Universitario Marqués de Valdecilla para su valoración.