Garbiñe Espejo: “no vamos a consentir que la clase trabajadora vuelva a ser la pagana de una nueva crisis”

La secretaria General de Comisiones Obreras (CCOO) de Industria, Garbiñe Espejo, ha señalado en Santander que el sindicato “no consentirá que la clase trabajadora sea de nuevo la pagana de una nueva crisis”, tal y como pretende la patronal, a la que ha acusado de estar “poniéndose de perfil”.

Espejo, que acudió a Cantabria para participar en una asamblea y hablar sobre el pacto de la industria que, entre otras, está promoviendo la organización, ha realizado estas declaraciones a las puertas de Global Steel Wire (GSW), tras suspender la convocatoria prevista en la sede de CCOO, manteniendo a todo el Consejo de la Federación de Industria y a todo su activo sindical junto a los piquetes informativos a las puertas de las principales industrias en apoyo a los huelguistas tras la carga policial de esta mañana.

Así, se ha improvisado una asamblea en las puertas de GSW, donde estaban concentradas alrededor de 200 personas, y donde Garbiñe Espejo ha estado acompañada por Rosa Mantecón, secretaria general de CCOO Cantabria y por César Conde, secretario general de CCOO de Industria Cantabria.

La secretaria general de CCOO de Industria ha señalado que ahora “es el momento de la corresponsabilidad, de poner propuestas encima de la mesa que garanticen que la clase trabajadora no pierda poder adquisitivo” y ha subrayado que en el sector del metal no puede pasar como en la hostelería o la sanidad, “donde no hay profesionales para atender los servicios. Estamos aquí para defender una industria con calidad, una industria con derechos”.

Garbiñe Espejo, que se ha solidarizado con las más de 20.000 familias que viven de la industria del metal en Cantabria y les ha mostrado todo su apoyo, ha incidido en que hay que seguir hasta lograr unas condiciones de trabajo dignas y que para ello, entre otras cosas, se ha convocado una gran manifestación en Madrid el 21 de junio para exigir un Pacto de Estado por la Industria “ya, de forma urgente, que garantice una industria soberana en nuestro país, que sea el motor de la economía y que, además, ponga en el centro del debate, de las decisiones, las condiciones laborales de los y las trabajadoras de la industria”. 

Fiscalidad

Además, la representante de CCOO de Industria, ha lanzado un mensaje claro al Gobierno: “que tome de manera urgente medidas en materia de fiscalidad para que ese pacto de rentas tan necesario llegue cuanto antes al bolsillo de los y las trabajadores porque el incremento de la cesta de la compra y de la energía no se puede sostener más por el conjunto de la clase trabajadora”.

Por su parte, Rosa Mantecón ha instado a Pymetal, la patronal que está negociando el convenio del metal, “a recuperar la cordura y busque una salida a este conflicto que está llevando a miles de trabajadores y trabajadoras a la calle a secundar una movilización que han entendido imprescindible para Cantabria porque la industria es el motor económico de nuestra región, además de un elemento esencial para la cohesión social y para fijar población en el territorio”.

Sobre los incidentes de Astander, Mantecón ha señalado que ya se han dirigido a la Delegación del Gobierno de Cantabria para que tomen medidas sobre la carga policial y ha animado a las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado a recuperar “una actitud cordial y digna” para los y las trabajadoras que se están movilizando por un convenio digno y unas condiciones laborales más justas.

César Conde, por último, ha valorado la negociación de ayer en el Orecla y ha dicho que Pymetal “se ha retratado delante del Gobierno de Cantabria” porque el director general de Trabajo, Gustavo García, que estuvo ayer durante toda la mediación, “ya se ha dado cuenta de quién es el que torpedea la negociación y cómo es la forma de negociar de esta patronal”.

“Nosotros aguantaremos hasta que la gente aguante y los y las compañeras del metal tienen mucho ánimo. Sabemos que se podría haber arreglado mucho antes, incluso la CEOE nos da la razón, pero está claro que Pymetal nos ha querido echar un pulso y que está demostrando que no tiene ninguna preocupación por las 1.500 empresas ni por las 20.000 familias que viven de este convenio”, ha concluido Conde.