La Residencia Cantabria tendrá su Plan Director para dar uso a este edificio vacío desde 2016
El vicepresidente regional, Pablo Zuloaga (PSOE), anuncia su licitación para el mes de marzo por 611.000 euros, su contrato y se decidirá su demolición o mantenimiento
La Residencia Cantabria tendrá su Plan Director para dar uso a este edificio vacío desde el año 2016. El vicepresidente del Gobierno de Cantabria, Pablo Zuloaga (PSOE), ha anunciado hoy su licitación en el mes de marzo, por un importe de 611.000 euros, y que contempla la decisión sobre la demolición y gestión de residuos o consolidación en función del análisis de las patologías que presenta, un estudio de usos que se podrá dar a este espacio de 32.000 metros cuadrados dentro del ámbito sanitario, construido en la década de los 60, y el posterior anteproyecto de obra.
Los primeros resultados sobre la solvencia del edificio se podrán conocer en julio de 2024 y concluiría con un anteproyecto de obra, en función del uso y el estado de la edificación, a finales del próximo año. En su conjunto, contará con una “inversión horizonte” de 65 millones de euros.
“Queremos dar todos los pasos previos para tener el anteproyecto en 2024, un proyecto redactándose en 2025 y una posible adjudicación de obras en 2026”, ha explicado el vicepresidente, que ha considerado que estos plazos “son reales y posibles” y lo ha comparado con “los pasos que se dieron la pasada legislatura con el proyecto del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria (Mupac), que ya está adjudicado”.
Además, el Plan Director hará un estudio de los usos de esta construcción dentro del ámbito sanitario. Para ello, se prevé una encuesta tanto a agentes públicos de Cantabria como a la ciudadanía que podrán plantear sus propuestas sobre el futuro de este edificio, siempre en el ámbito sanitario, pero más allá del uso clínico, al que debía ceñirse hasta que el pasado año el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá “dio la llave” para que la Residencia Cantabria pudiera destinarse a fines como la docencia, innovación, formación, la investigación o la gestión “bajo el paraguas sanitario”.
El vicepresidente ha citado algunos ejemplos del uso que podría albergar este edificio, como el traslado de la Consejería de Sanidad, ampliar las disciplinas formativas de la Universidad de Cantabria que tienen que ver con la sanidad, otros usos vinculados a la expansión del Instituto de Investigación Sanitaria Valdecilla (Idival), el Hospital Virtual o la Fundación Marqués de Valdecilla, o acoger el futuro ente de gestión del transporte sanitario, entre otras posibilidades.
“Pasaremos de tener 32.000 metros cuadrados improductivos a tenerlos llenos de actividad, vinculado a la ciencia y al conocimiento biosanitario, que es garantía de futuro para Cantabria”, ha añadido.
Alcaldesa
La alcaldesa de Santander, Gema Igual (PP), ha exigido al Gobierno cántabro “la máxima agilidad” para actuar en la Residencia Cantabria y ha solicitado tanto al presidente Miguel Ángel Revilla (PRC) como al vicepresidente Pablo Zuloaga (PSOE) que mantengan informado al Ayuntamiento de Santander sobre sus planes sobre el edificio y cuente con la Administración local a la hora de decidir sobre los usos que se vayan a proyectar en el mismo.
“No podemos seguir asistiendo al progresivo deterioro de un inmueble de esa magnitud y esa importancia para la ciudad sin hacer nada para remediarlo o para darle una utilidad adecuada a ese espacio”, ha señalado.
La regidora santanderina ha recordado que en todas sus reuniones con Revilla y Zuloaga ha insistido en que el Ayuntamiento debe ser partícipe en todas las decisiones que afecten a la Residencia Cantabria “por su ubicación estratégica y por su relevancia para Santander”.
Además, en abril del pasado año Gema Igual presentó al ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones del Gobierno español, José Luis Escrivá, un original proyecto de arquitectura sostenible para el edificio, que permitiría aprovechar la construcción existente con una novedosa técnica de edificación que ampliaría el espacio disponible añadiendo nuevas piezas prefabricadas en las fachadas del actual inmueble.
La propuesta del Ayuntamiento de Santander convertiría el edificio en sostenible, ganando luminosidad con grandes cristaleras, y podría acoger casi 300 apartamentos y estudios para turismo médico, residencia de los MIR del Hospital Valdecilla, alojamiento para familiares de pacientes o, incluso, viviendas sociales.
“Se trata de una propuesta innovadora y creativa que se basa en otra forma de pensar la arquitectura completando lo existente con una extensión exterior, que ya ha sido desarrollada con éxito en la torre de viviendas Bois-le-Prêtre en París, premiado con el galardón Pritzker 2021”, ha señalado.
No obstante, Gema Igual considera que el Ayuntamiento está dispuesto a valorar otras opciones “si las hay” pero “no a demorar en el tiempo la decisión sobre sus usos”. “El Gobierno cántabro no puede dilatar más el proceso ni dejar al Consistorio santanderino al margen, porque es un edificio fundamental para el desarrollo futuro de la ciudad”, ha concluido.