Charo Arredondo, ganadera: “A 40 céntimos al menos debería llegar el precio de venta de la leche”

“A 40 céntimos al menos debería llegar el precio de venta de la leche”. Así lo aseguró Charo Arredondo, natural de Soba, una mujer que lleva toda su vida dedicada a este sector y que estuvo presente en la concentración frente a la fábrica Celta, en Meruelo, para protestar contra las empresas lácteas por el bajo precio al que compran la leche.

Heredó la ganadería de sus padres y ellos a su vez de sus abuelos. Ahora, con 160 cabezas de ganado, de las cuales ordeña la mitad durante todo el año y produce 900.000 litros de leche, su hija tira hacia adelante del trabajo.

En su opinión nunca el precio ha dado para sobrevivir, pero en agosto de 2021 se disparó el precio de sus costes, los cereales, el pienso hasta cerca del 30 por ciento, la alfalfa, el gasóleo, la luz, los plásticos y los fertilizantes. “Con esta situación es imposible producir y nos metemos en números rojos”, explicó.

Si bien existió un avance con los contratos que se llegaron a firmar con las industrias lácteas, lo cual les permite realizar previsiones sobre sus inversiones y su producción, Charo Arredondo incide en que el precio de la leche en los lineales no debería bajar de 70 céntimos, cuando ha llegado a estar a 54.

Desde su punto de vista “este cambio supondría un incremento de gasto de entre seis y siete euros al año a cada consumidor y supondría la salvación para el sector”.

Ivón Entrecanales, de Labarces, en Valdáliga, también estuvo presente en la concentración. Tiene en la actualidad 200 vacas en un negocio que heredó de su padres y donde ahora sigue su hijo.

Su visión del problema se remonta al año 2000 cuando se pactaba el precio con las empresas. Asegura que en 30 años han desaparecido 90.000 granjas y respecto a los costes, este ganadero, que lleva toda su vida en el sector, indicó que el precio del pienso ha subido un 30 por ciento, cuando la alimentación de los animales en una granja supone entre el 55 y el 60 por ciento de los gastos. “Esta situación, ha provocado que se sacrifiquen muchas vacas”, aclaró.

Al igual que Charo Arredondo, coincide en que el precio no debería ser inferior a los 40 céntimos el litro, pero se está pagando a 35. De hecho anunció que están en negociaciones con la empresa Nestlé y sin embargo no han contestado todavía a su última petición.

En cuanto a los lineales, Ivon Entrecanales admite que se ha producido una mejora en el precio, ya que se ha incrementado hasta 65 o 66 céntimos el litro.

Convocados por las organizaciones agrarias UGAM-COAG, ASAJA, UPA y AIGAS, los ganaderos continúan sus movilizaciones y en esta ocasión en Meruelo se reunieron con el director de Celta.

Reunión 

“Más de lo mismo, al igual que en otras fábricas nos dicen que son multinacionales y que la decisión del precio no depende de ellos, solo producen”, comentó el secretario general de Asaja, Raúl Guillaron.

Aun así, tras el encuentro, el representante de los ganaderos adelantó que en enero de 2022 puede haber un avance, pero no ha fijado el precio. “Se empieza a ver el fruto de las movilizaciones en Cantabria, aunque en otras Comunidades no se han movilizado como aquí”, matizó.

Mercadona subió dos céntimos el litro de las leches básicas y enriquecidas y el Gobierno central ha anunciado que es necesario revisar los contratos acorde a los costes de producción. “Debemos seguir insistiendo para conocer dónde se queda el dinero tras el aumento del precio en los lineales, ya que al ganadero solo llegan tres céntimos”, hicieron hincapié.

“En breve tendrá lugar una reunión de la Mesa Láctea de Cantabria para abordar el tema”, recalcaron los representantes de las organizaciones ganaderas, quienes reseñaron que retomarán las conversaciones con Lupa para que se convierta en uno de los mayores compradores de leche de Cantabria.

Por otro lado, el secretario de UGAM-GOAC, Gaspar Anabitarte, declaró que el precio de venta ha subido de 34,80 a 36,50 y esperan llegar a 38 y animó a los ganaderos a seguir fuertes cuando las industrias quieran bajar el precio.

Durante la concentración, que duró dos horas, los ganaderos hicieron sonar el claxon de sus tractores y acudieron con pancartas en las que se podían leer mensajes, tales como ‘Por lo que lucharon nuestros abuelos. El campo no se vende, se defiende’, ‘Orgullo cántabro de nuestro sector primario’ o ‘Ganadero en extinción. Precio justo de la leche’.

Entre los asistentes se encontraban el alcalde de Meruelo, Evaristo Domínguez (PP); el consejero de Desarrollo Rural, Guillermo Blanco (PRC); el senador nacional popular, Javier Puente, y el diputado regional del PP, Pedro Gómez.