domingo. 24.11.2024
El tiempo

El PRC plantea actuaciones para dinamizar el turismo en Gamazo, el Sardinero y el barrio Pesquero

La apuesta por el turismo de autocaravanas es otra de las iniciativas de los regionalistas al segundo Plan Turístico de Santander

El Sardinero, en Santander. R.A.
El Sardinero, en Santander. R.A.
El PRC plantea actuaciones para dinamizar el turismo en Gamazo, el Sardinero y el barrio Pesquero

El Grupo municipal regionalista en el Ayuntamiento de Santander ha propuesto una batería de iniciativas al segundo Plan Turístico de la ciudad con el objetivo de contribuir a la dinamización turística y cultural de Gamazo, barrio Pesquero y El Sardinero.

Las propuestas presentadas a la Concejalía de Turismo para su estudio abarcan desde el desarrollo de un proyecto cultural en el barrio Pesquero, el mantenimiento económico del evento La Vaca Gigante y la apertura del Planetario.

Respecto al proyecto del barrio Pesquero, el portavoz del PRC, José María Fuentes-Pila, apuntó que se trata de una actuación que proviene de una iniciativa vecinal y busca potenciar la zona por medio de una vinculación con su esencia marinera para aportar un valor añadido a nuestra ciudad, “no solo al barrio Pesquero si no al entorno de Castilla -Hermida”.

Un segundo pilar hace referencia al turismo deportivo vinculado al surf y, en concreto, al evento La Vaca Gigante, que ha tenido una repercusión mundial con cifras de visionado e impacto impresionantes rondando los 20 millones de espectadores a nivel mundial, y un retorno económico cercano a 1,5 millones de euros.

“Creemos en el turismo deportivo y en el surf, prueba de ello es nuestra lucha por recuperar el REMA como centro polivalente del Surf y, con esta propuesta, dotar de estabilidad económica a las futuras ediciones de La Vaca Gigante para que crezca aún más y sea el referente del norte de España en competiciones de grandes olas”, añadió Fuentes-Pila.

En cuanto al Planetario de Santander, el portavoz apuntó que se trataría de dar vida a un proyecto que no tiene actualmente parangón en España y cuya apertura requeriría una puesta al día en accesos, acondicionamiento exterior e interior, así como una persona dedicada a su atención. “Tenemos lo principal, el Planetario, una adecuada política de promoción podría hacer de él un referente en el norte de España y un nuevo hito diferenciador respecto a otras capitales para un turismo familiar y cultural”.

Autocaravanas y terrazas

Actualmente existen dos áreas de servicio específica para estos vehículos: uno de en el polígono de Nueva Montaña, inexistente en su uso y que apenas cumple las expectativas deseadas, y la otra en Las Llamas, la cual a la vista de los últimos acontecimientos que se dan en la zona, se queda pequeña al comprobar como tienen que estacionar incluso fuera del área limitada, según los regionalistas.

Dotar a una ciudad como Santander de una oferta de áreas de acogida para autocaravanas representa múltiples ventajas como la de utilizar racionalmente el espacio de estacionamiento en temporada alta, prolongar la temporada turística, incrementar la oferta de plazas turísticas sin necesidad de crear nuevas estructuras urbanísticas, así como potenciar el comercio y la hostelería local.

Es por ello que el Grupo municipal del PRC viene reclamando desde la pasada legislatura que se siga trabajando en la búsqueda de espacios en la ciudad, próximos al centro o de medios públicos de transportes, que sean tranquilos y seguros, para albergar más plazas compatibles con el uso de la auto caravanas como alojamiento, equipándolos correctamente para ello y más tras la pandemia que ha impulsado este turismo exponencialmente.

Igualmente los regionalistas han propuesto la revisión y modernización de la ordenanza de terrazas como una “oportunidad” para establecer, de una vez por todas y con criterios claros y definidos, una regulación de la ocupación del dominio público municipal mediante mesas, sillas, veladores e instalaciones análogas, desde el mayor consenso posible,  y que permita por un lado “el derecho al descanso” de los vecinos y, por otro, el necesario “desarrollo económico” de la hostelería y, por definición, de la ciudad de Santander para que siga siendo motor de riqueza y empleo.