Conflicto en Santoña con el barco gallego Carmen Barcia por, presuntamente, utilizar más aparejos de los permitidos

El puerto pesquero de Santoña vivió hoy un conflicto entre la Asociación de Pesca Sostenible de esta villa y el barco gallego Carmen Barcia por, presuntamente, utilizar más aparejos de los permitidos por la legislación.

Por este motivo, el colectivo, que aglutina a los barcos de pesca artesanal del municipio, requirió una inspección en la embarcación por parte de los responsables de Pesca de Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Guardia Civil. Una vez concluida, los agentes determinaron que todo es legal y por lo tanto no se ha presentado ninguna denuncia, explicaron desde la Guardia Civil.

La legislación permite a los barcos utilizar 4.500 metros de aparejos. Aunque no han podido cuantificar el número de aparejos que utiliza este barco, la Asociación Pesca Sostenible señaló, antes de la inspección,  que es una exageración y de hecho anunciaron que en el momento de la inspección la mayoría de los aparejos se encontraban en el barco pesquero, tras atracar en el puerto de Santoña.

Sin embargo, los inspectores detectaron 98 aparejos, algunos de ellos para reponer, y al ser viernes y no tener más en la mar, no levantaron acta por ninguna infracción. Además, se revisó su diario de a bordo y el barco ha cumplido con la legislación en todo momento, según se obtiene de la inspección.

Si bien, esta asociación ha hecho hincapié en que la situación de esta embarcación es legal, puesto que cuenta con autorización y licencia para faenar en aguas interiores de Cantabria y la pesca que captura no se encuentra en veda, langosta, abacanto, raya, lenguado, entre otros, el problema viene por el excesivo número de aparejos que utiliza.

Según el colectivo de barcos de pesca artesanal de Santoña, el barco gallego lleva pescando  varios días en la zona que comprende desde el Faro Pescador al Cabo Quintres y atracando en Santoña, mientras que otra embarcación, también gallega, está realizando, presuntamente, la misma práctica y entrando con la pesca en la lonja de Santander.

“Hoy, representantes de esta asociación hemos dialogado con el patrón del Carmen Barcia, quien ha asegurado que se marcha”, explican desde Santoña, desde donde inciden que “evidentemente de forma legal puede venir quien quiera a pescar, pero si no se cumple la legislación en lugar de uno vendrán 100 barcos”, declararon antes de la inspección realizada.

El barco gallego, que lleva varios días en la zona, regresa a casa, pero volverá a su actividad, en esta ocasión, entrando en el puerto de Santander.