La Guardia Civil detiene a un hombre que por dos veces casi atropella a dos agentes para evitar ser parado
Los agentes se vieron obligados a retirarse a la calzada para evitar ser arrollados
Componentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Cantabria han detenido a un hombre de 26 años y vecino de Piélagos, como presunto autor de los delitos de atentado a agentes de la autoridad y contra la seguridad vial, por conducción manifiestamente temeraria.
Los hechos ocurrieron los pasados 21 y 24 de diciembre, el primero sobre las 19.00 horas, y el segundo a las 1.45 horas de la madrugada, cuando componentes de la Guardia Civil de Tráfico tenían dispuestos controles específicos para la detección de alcohol o drogas en la conducción.
El primero de los sucesos tuvo lugar en la carretera N-634, en el punto kilométrico 220, momento en que un turismo se acercó al punto de verificación donde un agente le hizo señales de alto, haciendo el conductor caso omiso y acelerando la marcha, de tal forma que el guardia civil se retiró de la calzada para evitar ser arrollado.
La madrugada del día 24 de diciembre, en esta ocasión en la carretera de Renedo a Zurita, a la altura del kilómetro 1,200, se volvió a dar el alto nuevamente al mismo turismo, reaccionando su conductor de igual forma, acelerando e iniciando una acción evasiva, que obligó de nuevo a otro agente a tener que retirarse apresuradamente de la calzada para evitar ser atropellado.
Por ambos casos, componentes del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Torrelavega instruyeron diligencias, comenzaron una investigación para la localización y detención del conductor del citado vehículo, que tuvo lugar el pasado día 11 de enero, como presunto autor de los delitos de atentado contra agente de la autoridad y conducción temeraria.